martes, 6 de octubre de 2009

Cronicas de ex novias Parte 1: El primer amor, la rockera y la loca

Lástima que no fuiste así

A manera de prologo quiero contarles que hace unos días en esas conversaciones anecdóticas, en las que se recuerdan los disparates que se han dado a lo largo de nuestras vidas tocamos el tema de las novias, aquellos seres con los que se pasa un tiempo y que en ocasiones (muy pocas a decir verdad) sientes que valdrá la pena y decides hacer algo más que solo pensar en ti, por razón de espacio y tiempo es posible que no me acuerde de todas, las que falten pues…quiere decir que no me importaron lo suficiente como para que las recuerde…así que de malas, y las que menciono pues…espero que no me guarden rencor. En esta primera parte no he respetado ni cronología ni sentimentalismos, tan solo están dentro del top 20 de las más absurdas, el orden que les dé es netamente cómico, así que no se emocionen.

Un factor común entre las novias es que al principio todas parecen “lindas y tranquilas ovejitas”, para con el tiempo convertirse en psicóticas, neuróticas, estrambóticas recién salidas del Lorenzo (menos tú cielo, tú eres especial). Uno de los limitantes al momento de decidirme por una relación “seria” es todo lo que me ha pasado en otras relaciones “serias” y es que como alguien me dijo por ahí “me han pasado muchas cosas extrañas”.

Recuerdo hace muchos años en la época del escuela había una chica que me gustaba, era cachetona, su cabello, su sonrisa, lo linda que era (tenía menos de 10 años no esperen que le vea los senos o caderas…porque de hecho no tenía) su sonrisa era mi sonrisa, su luz era mi luz, en aquellos años corrían por mis venas muchos sentimientos y mucha estupidez, sí sentimientos y estupidez la peor combinación que puede tener un pre púber que se acerca a los azarosos caminos de las relaciones sentimentales, y es que lo último que se necesita en el momento de empezar las relaciones sentimentales es: estar lleno de sentimientos. Pero nada es eterno y la relación acabo tan fugazmente…en un evento de navidad, cuando ella fue elegida pastorcita y yo angelito, es impensable que una relación entre un ángel y una pastora pueda llevarse a cabo, así que todo terminó ahí. Años más tarde ya en el colegio la volví a encontrar en aquellos caóticos juramentos de bandera colectivos, a mi la adolescencia me estiró y ya no era el enano que ella conoció, a ella la grasa de los cachetes le creció y se le fue a los pechos y a las caderas, aunque no llenó por completo mis expectativas en conjunto no era nada despreciable, menos aun en aquellos años en los que con mis amigos carecíamos de un criterio demasiado exigente (eso lo ganamos después), fue a esta edad donde desarrollamos el criterio de: “no hay mujer fea, solo belleza rara” (que por cierto cada día se aplica menos). Después de varios encuentros, varias llamadas por teléfono hasta tarde, la relación fue concretándose, pero no era el momento y aquello que no fue aprobado por el destino, no puede darse, la relación entre el angelito y la pastorcita no pudo ser.

En aquellos años locos del colegio y peor aun con la calidad de amigos que me conseguí las cosas podían ser todo menos normales, en este articulo no incluiré las relaciones que se dieron en una fiesta, fin de semana, reunión, sala de espera, bus interprovincial, campamento, taller, curso, iglesia, dependencia pública, etc, etc…

Una relación memorable y catastrófica fue la que tuve con Raquel (nombre protegido) una rockera, y esto seguramente sorprenderá a muchos, se dio en una de esas salidas donde nos queríamos comer el mundo, como dicen: polos diferentes se atraen, la relación iba bien y podríamos decir que era una relación normal (dentro de lo que cabe) cierto día me invitó a un concierto a rock, y yo dije pues bueno vamos, al principio la música moderadamente chévere, y llegaron los amigos y las amigas, mi vestimenta completamente de negro con piercing incluido (debía mimetizarme), una de ellas me dijo: mosheas?? Y yo: pues claro, al rato todo el mundo corría en ronda, era una nube de polvo y rostros que se movían a velocidades vertiginosas, delante de mí una nube de greñudos y greñudas que se empujaban, golpeaban y gritaban, en la boca, el primer golpe que me dieron fue en la boca, luego uno en el estomago y mis piernas sintieron el sabor de un verdadero mosh…carajo!! Al final un sabor a sangre, unos cuantos moretones y una relación menos, me divertí…creo.

Lo peor de salir con una chica religiosa (testigo de Jehová, católica, cristiana evangélica, adventista, musulmana, atea, maradoniana, etc) es que inevitable, indudable e invariablemente querrá convertirte, no importe si ello le lleva toda la vida, utilizará todos los recursos a su alcance para que te conviertas, incluso (este me encanta) te dice que es el diablo quien no deja que su amor se consume, que es el diablo quien hace que la rechaces a su religión y por ende a ella (¿?). Siempre he mantenido una postura ecléctica y puedo no creer en lo que mi novia cree, pero lo respeto y la apoyo en su creencia sin que eso signifique que la aceptaré como mía, parte de ese apoyo implica acompañarla a los diferentes eventos que tenga en su iglesia/secta o iglesias/sectas amigas, cierto día me pidió que la acompañe a una iglesia a una presentación, superé mi aversión a las iglesias, pero me encontré con un pastor bastante “especial” al rato empezó a llamar a aquel joven que no ha recibido a Cristo en su corazón, y yo miraba para los lados, después dijo que aquel joven que salvará vidas debe tener a Jesús en su corazón, en este punto me empecé a preguntar si había alguien más que estudiara medicina y que estuviera en el mismo lugar, al rato dijo ese joven que estudia medicina y está de azul, vamos que este mas que pastor le hubiera valido ser adivino y yo seguía buscando a mi futuro colega que para colmo tenía los mismos gustos en colores que yo, más le vale, porque es bastante feo ser un científico descreído como para tener mal gusto en ropa eso sería el colmo, al rato aquel pastor-adivino-brujo dijo que debía pasar adelante aquel joven que no ha recibido a Cristo Jesús en su corazón, quien sigue medicina, está vestido de azul y está en la fila izquierda…mierrrrda…lo primero que pensé que alguien me estaba copiando, lo segundo que pensé fue cuan pequeño es el mundo y lo tercero fue que esa relación debía terminar…la respuesta fue simple: lo lamento el diablo me obligó a esto…obviamente por medio tuyo al quererme convertir a patadas, aprendido esto aprendido todo, no me quiero aventurar a salir con una musulmana y despertarme un día con un chaleco explosivo o enterarme que cambiamos la salida al campo por ir a perseguir niños cristianos, o que en lugar de ir al cine nos vamos a inmolar en la matriz de telmex, aunque esto último lo haría sin ningún motivo espiritual de por medio. Pero como el hombre es el único animal que se tropieza dos veces con la misma piedra volví a caer con la cristiana loca, y un día me dijo que nuestra relación no podía ir mas porque Dios le había hablado y que ella una hija de dios (ojo con la minúscula) no podía estar con un demonio que no puede aceptar la religión, ahora viéndolo en perspectiva me parece gracioso, y me impresiona que el buen Dios (el original) pueda hablar con un ser humano normal sin arbustos en llamas, ni luces, ni voces retumbando desde el firmamento, ni nada…y si bien nunca creí de forma literal lo de hija de dios, supe al instante que si era una hija…una hija de…desde ahí juré no meterme otra vez con una religiosa loca…hasta ahora voy muy bien.

Continuará…

3 comentarios:

  1. jaaaa!!!

    Yo... sin comentarios....jeje

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  2. Jajaja, toca, si del cielo te caen limones... aprende a haacer limonada...

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  3. JUA JUA yo conosco a la loca, a las otrs 2 ni idea loco bien que te safaste de esa man

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