sábado, 31 de octubre de 2009

Entre el día del escudo y halloween


Hoy celebramos el día del escudo…pero alguna vez se han preguntado ¿para qué nos sirve el escudo? Porque para la única cosa que un “escudo” puede servir, el nuestro no lo hace, es más nunca he visto a un soldado defendiéndose con un escudo en los conflictos que hemos tenido, y cuando los policías salen a reprimir a “los revolucionarios de sobre” usan escudos de plástico, no “nuestro” escudo, pues obvio – me dirán- el escudo tiene tanta cosa que sería fastidioso correr con eso, hasta podrían sacarse un ojo, pero aquí viene lo raro y es que incluso cuando los metropolitanos salen a perseguir vendedores informales no usan el escudo de Guayaquil que tiene una forma más práctica de ser usado como…escudo, entonces pregunto otra vez: ¿para qué nos sirve un escudo? Pues para nada…pero cuando está en la bandera nos diferencia, ya sabemos que no es la de Venezuela, ni la de Colombia, es nuestra…por el escudo, entonces… ¿Por qué cuando nos enseñan los símbolos patrios nos dicen que son 3? Porque sí, en la escuela nos enseñan que los símbolos patrios son: la bandera, el escudo y el himno…aquí ya me confundí, porque si no le ponemos el escudo tenemos la bandera de Colombia…o la de Venezuela…creo que por razones como esta llegó un punto donde los chicos decidieron mandar a la mierda al escudo, a la mierda los símbolos patrios y acoger como fiesta halloween, claro, porque es mucho más sencillo, y es global, asi que una calavera será calavera aquí y en china, y superman será superman así los duros de la bahía no lo hagan con los mismo colores, yo me acuerdo que el primer disfraz de halloween que tuve fue uno de superman, precisamente en la época en la que pensaba que era adoptado, ahora no, ahora ya no pienso que sea adoptado, ahora…estoy convencido . en fin halloween brinda esa posibilidad de salir de lo cotidiano, de salir de una vida de clases y casa todos los días, por un momento, por un día, la magia de la tele es nuestra, en halloween podemos ser quien queramos, lastimosamente con el tiempo no podemos seguirnos disfrazando…no porque hayamos madurado, pues no, es simplemente porque ya no hay disfraces para nosotros, y los que hay son un asco, hace unos días pasé por una tienda de disfraces y vi un disfraz de lo que en algún momento quisieron que sea batman…pues no les salió, lo que vi fue algo como ratman, porque eso parecía una rata, y peor estuvo otro en el que el traje venia con una máscara dorada en ese punto no sabía si era batman the dark knight o batman the dragqueen.

En este punto los mas “patriotas” (entiéndase patriotas como eufemismo para pendejos) me dirán que es una estupidez que me burle de los símbolos patrios y bla bla bla, pues…me vale, quienes me conocen saben que solo hay 3 opiniones que me importan en este mundo, en fin, no tengo nada en contra de los símbolos patrios, si bien no comparto la idea de jurar ante un trapo que nunca se lava y encima tener que besarlo como una muestra de nuestro compromiso para con la patria, una patria a la que le vale un carajo quienes seamos y qué diablos hagamos, me parece bonito como argumento para darles algo en que pensar a la gente que es demasiado tonta para pensar por sí misma, el mismo principio por el que se inventaron los santos, las vírgenes, los vigilantes que no aceptan coimas, papá Noel, el ratón de los dientes, los políticos honestos…y dios (sí con minúscula, el falseta)

Incluso es cómico que en los medios salgan todos los presentadores disfrazados, y a medio programa hacen una pausa, se ponen solemnes (o al menos lo intentan) y se refieren al día del escudo, luego dan paso a una reportera que se ha conseguido un escudo vago de por ahí…y oh! Sorpresa…la reportera está disfrazada!.

Detesto la doble moralidad con la que se maneja la gente, quién aun no sepa porque mi misantropismo salga a la calle y de una mirada atrás, una a la derecha, otra a la izquierda, otra adelante, y en las otras cuatro direcciones…en alguna de esas direcciones encontraran a alguien haciendo una estupidez…ahí su respuesta.

En fin me gusta halloween, ya no lo disfruto como antes, quizá si tuviese amigos que me sigan el juego me disfrazaría…quizá, pero al menos me quedan los recuerdos, los recuerdos de una época en la que no me importaba el escudo, solo divertirme.

Nota 1: tampoco me importa ahora.
Nota 2: feliz halloween
Nota 3: me sienta el azul

domingo, 25 de octubre de 2009

Tonterias de la historia

A mí me gusta mucho leer Historia, porque leer Historia es algo así como poder viajar en el tiempo.

La mayoría de la gente piensa que pasar a la Historia es muy difícil. Y ¡qué va...! En realidad es más fácil que salir en la extra, de hecho, la mayoría de la gente que figura en los libros de Historia es por hacer de idiota o por haber muerto sangrientamente.

Los egipcios por ejemplo... Estos tipos pasaron a la Historia porque construían las pirámides trayendo unas rocas enormes desde cientos de kilómetros... Vamos a ver: ¿no hubiera sido más fácil hacer las pirámides donde estaban las piedras?...aunque nos queda siempre la opción de que fueron los ovnis, pero, no se les hizo muy molesto perro viaje y evitar toda la basura que hay en el espacio para venir a jugar con piedritas y una civilización en nacimiento…pero bueno en gustos y colores…además, ¿para qué sirve una pirámide? ¿Qué sentido tiene construir una montaña cuando ya las hay hechas?

Y es que la idiotez humana (o alienigena) no tiene límite.

¿Qué me dicen de la guerra de Troya? Una guerra que empieza por unos cuernos y termina porque el enemigo le regala a los otros un caballo de madera... ¿Se imaginan el momento?

—Oiga jefe, que los griegos nos quieren regalar un caballo de madera...

—Ah bueno, pues ponlo en la plaza, a caballo regalado no le mires el vientre…digo…diente

Y los griegos desde dentro:

—¡Ya no estamos...! ¡Nos hemos ido...!

Pero, bueno, ¿serán pendejos los troyanos? ¿Cómo no se dieron cuenta de que el caballo era como un huevo Kinder? Sí: era un juguete, era algo nuevo, y llevaba una sorpresa dentro... La única diferencia era que en vez de chocolate...era gente.

Y luego están los romanos, que para un imperio que tenían se les cayó. Claro, ¿qué se puede esperar de un pueblo cuyo personaje más importante, Julio César, es un tipo que llevaba una rama de laurel en la cabeza, quizá pensaba que era bueno para la caspa, fíjense que si eran idiotas que inventan los números romanos y luego no los usan, porque todos los reyes tienen números romanos menos los romanos: Alfonso X, Luis XVI, Juan Carlos I...hasta los papas!! y sin embargo, ellos se llamaban Marco Aurelio, Octavio Augusto, Julio César... ¡PENDEJOS! ¡Si más que emperadores parecen futbolistas brasileños!

Hasta los árabes, que inventaron los números árabes, o sea, los normalitos, llevan números romanos: Abderramán I, Abderramán II, Abderramán III... que por cierto, ¡qué manía con llamarse Abderramán!

Aunque más idiota todavía era lo de los apodos: a un tipo que da un cuchillo a los enemigos para que maten a su hijo, le llaman Guzmán el Bueno, pues si éste era el bueno, ¿qué hacía Pedro I el Cruel? ¿Hamburguesas de vacas locas?

O el conde-duque de Olivares... ¿En qué quedamos? ¿O conde, o duque? Esas dudas mosquean, es como decir camarón-langostino... Mire usted: o camarón, o langostino, ¡aclárese con el marisco!

Porque por cosas más pequeñas se monta una guerra, y luego a ver quién la para, que ésa es otra. Va una guerra y dura treinta años... y, ¡zas!, los tipos la llaman la Guerra de los Treinta Años. Otra dura cien... ¡zas!, y la llaman la Guerra de los Cien Años... Claro que, seguramente, los que la sufrieran le irían cambiando el nombre año tras año:

—Pues estamos en la guerra de los cincuenta y cuatro años... y esto va para largo.

Y cuando llegaron a los cien dijeron:

—Oye, vamos a hacer las paces rapidito que ya tenemos un número redondo.

¿Pero quién le ponía los nombres a las guerras? Otro idiota: las Guerras Médicas... ¿Qué pasa, que se lanzaban jeringuillas? ¿Y la Guerra del Opio? Ésa sí que tuvo que ser divertida, todos voladotes:

—Está chevere esta guerra, ¿eh?... Yo me voy a reenganchar, mira los enemigos son de colores…wiiiiii…

A la Historia también se puede pasar porque tu madre te arme reverendo relajo, como Boabdil el Chico, que perdió Granada y su madre de una le dijo:

—Llora como mujer lo que no has sabido defender como hombre...

Un momento, un momento. ¿Eso es lo que diría una madre? Yo no me lo creo... las madres no hablan así; lo normal es que le dijera:

—Mira que te lo dije, Boabdil: «Que vas a perder Granada... que vas a perder Granada...», y tú, ni caso. ¡Un día de éstos vas a perder la cabeza y no te vas a dar ni cuenta!

Pero si hablamos de idiotas que han pasado a la Historia, el que se lleva los aplausos es Cristóbal Colón, un tipo que descubrió América... pero por equivocación. ¡Porque él iba a la India!

Llega el tal Colón, más chulo que un ocho, y le dice a los Reyes Católicos:

—Miren, yo voy a ir a la India al revés que todo el mundo, es decir que el tipo ya en aquella época, tenía la misma obsesión que todos los hombres: buscar atajos.

Pero como todos los tontos tienen suerte, Colón encontró a dos que eran más tontos que él: los Reyes Católicos, para convencerlos de que la Tierra era redonda se sacó un huevo, es decir, sacó un huevo del bolsillo (pequeño espacio para los mal pensados) y lo plantó encima de la mesa...e Isabel la Católica dijo:

—Hombre, Colón, si eres capaz de hacer eso con un huevo, está claro que la Tierra es redonda...

Colón, además de idiota, era cabezón, se empeñó en que había llegado a la India y no había quien le quitara la idea...

—Ya hemos llegado, esto es la India... Si ya decía yo que por aquí era más corto...

Y los indígenas:

—Que no, que somos americanos... Fritos, ketchup, silla eléctrica, Kentucky, coca cola, mc donalds...

Vamos, no le convencieron ni a la hora de cenar:

—Hamburguesa muy hecha, poco hecha o al punto...papas fritas o asadas...

Y Colón dijo:

—¿Papa...? ¿Eso qué es?

—Papa, ¿esos viejitos que se encierran sin mujeres a hablar pendejadas...?

Pues ni aun así: el tipo era tan cerrado que se llevó las papas, pero a ellos les siguió llamando indios.

En fin, que hay gente que ha pasado a la Historia por las cosas más increíbles: Van Gogh por cortarse una oreja, Marco Polo por irse a la China y traer los juegos pirotécnicos,

Pilatos por lavarse las manos y Gandhi por dejar de comer, como las modelos...

No se extrañen que dentro de cien años la gente que pase a la Historia sea la que ahora sale en la portada de extra, vistazo o esa porquería emo-céntrica de revistas juveniles.

martes, 20 de octubre de 2009

Cuando nos sentimos culpables...

¿Saben ustedes de qué viven las joyerías?... del sentimiento de culpa, porque hay tipos que ponen los cuernos... y como luego se sienten mal, acaban comprándole una joya a su pareja. Y es que eso de que el amor es el sentimiento que mueve el mundo no es verdad... Lo que mueve el mundo es el sentimiento de culpa.

Cuando uno nace, no sabe lo que es sentirse culpable... de pequeños, somos como Pinochet: tú puedes pasarte toda una tarde quemando hormigas con una lupa y te quedas tan tranquilo... no se te ocurre comprarles ninguna joya.

Pero esto dura poco, porque el sentimiento de culpa es como los pelos de las axilas: naces sin ellos pero te van saliendo con el tiempo, un día, alguien te pregunta:

—¿Tú a quién quieres más: a tu papá o a tu mamá?

Y como todavía no te han crecido pelos en las axilas no piensas, «¡Qué carajo...!». Y sueltas:

—A mi mamá.

Y se monta una...

—O sea, que no quieres a tu papá... ¿No te da pena?

Y te pasas toda la noche angustiado, imaginando que tu padre se suicida dándose cabezazos contra el televisor o bebiendo aceite para auto. y tú te pones a rezar: «Por favor: que no se suicide mi papá, que no se suicide mi papá... que mañana dan dragon ball».

Y lo peor es que a medida que vas creciendo, el sentimiento de culpa crece contigo.

Un día te emborrachas y pierdes hasta el apellido, le vomitas el carro a un amigo... ¡Y aunque tú no quieras te sientes culpable!

—Manuel (nombre protegido), no me encuentro bien... ¿Tienes una fund...? ¡Boooooarjjj! (vomitas) chuta, hermano, perdona, me siento fatal.

—Chucha, Carlos, que el carro no es mío, es de mi papá.

—Deja, Manuel, no intentes animarme, me siento igual...

Pero el sentimiento de culpabilidad no para de crecer, llega una edad en la que te sientes culpable por todo, estás sentado en el autobús, ves que sube una ancianita temblorosa, ¡Y se acabó lo de ir cómodamente sentado! Tienes que hacer todo el viaje con la cabeza retorcida, mirando por la ventanilla, haciendo como que no la ves... Que cuando llevas un rato piensas... «¡Hay que ver qué mal lo pasaban los egipcios! ¡Y qué poco respeto tenían por las abuelas!».

¿Y cuando sales del ascensor y ves que un conserje está trapeando el portal? ¡Te sientes un cabrón por no ser capaz de levitar! E intentas atravesar aquello de puntillas... que pareces la lagartija del National Geographic.

Menos mal que un día te das cuenta de que el sentimiento de culpa también es un arma... y decides utilizarla, por ejemplo, para pedir un aumento de sueldo, porque lo tuyo, más que un sueldo, parece un premio Nescafé: «Cien dolares al mes para toda la vida», así que te metes en el despacho del jefe y le dices...

—Don José, nunca me he pedido una baja, cuando se murió mi padre, lo enterré en domingo para no faltar y gano tan poco que tengo la nevera vacía...

Pero tu jefe, que te ve venir, contraataca:

—Hombre, Gutiérrez, parece mentira: ha tenido diez años para pedirme el aumento y elige justo un momento en que la empresa está en crisis, estamos en medio de una fusión y mi hijo se ha quedado en cinco... y además, no se queje, que yo a mi padre lo tengo sin enterrar desde hace dos meses esperando a que la empresa se recupere.

En ese momento te sientes tan culpable que te dan ganas de decirle:

—Perdone, don José, si quiere me llevo a su padre y lo meto en mi nevera... Así la lleno.

De todos modos, donde más se utiliza como un arma el sentimiento de culpa... es en la pareja, los hombres, cuando queremos algo de ellas, nos ponemos malos...

—Cielo, baja tú la basura que tengo acidez.

¿Qué tendrá que ver? Es como decir: «Cielo, toca tú la guitarra que yo tengo caspa».

Esto es lo que hacemos los hombres, pero lo de ellas es terrorismo emocional. Cuando quieren conseguir algo de un hombre... ¡lloran! porque saben que eso nos desarma, si ella quiere ir a ver la última de Russell Crowe, nunca dirá: «¿Vamos a ver la última de Russell Crowe?», no... eso no es femenino, ella espera a que te sientes en el sofá con la colita y las zapatillas... y cada vez que la miras pone cara de José Luis Perales, hasta que le dices:

—¿Te pasa algo, cariño?

—Nada...(referencia en un post anterior)

—Mujer, como tienes esa cara...

—¿Y qué cara quieres que tenga, si ya no me quieres?

—Oye, pero ¿por qué dices eso?

—Pues porque ya no salimos nunca, ni al cine, ni a ver películas de Russell Crowe ni nada.

En ese momento sientes como el gusanito de la culpa crece y crece hasta convertirse en Godzilla (culpadzilla)... Y te sientes el miserable más grande del mundo mientras ella llora hecha un ovillo en el sofá... Así que le dices:

—ok cariño, que se jodan los documentales, vamonos ahora mismo al cine, sólo te pido un favor: ¿nos podemos llevar al padre de mi jefe que lo tengo en la nevera y me da cosa dejarlo solo?

sábado, 17 de octubre de 2009

odio a mis tataratataranietos...

Mañana decidí escribir una carta pidiendo a mis tataratataranietos (que asumo que ya pueden disponer de una máquina del tiempo), que me visiten ayer. Los condenados no han venido. Han tenido como 150 años para construirla y nada. Yo recomendé que estén atentos a los resultados arrojados por el LHC (large hadron collider) para los panas: acelerador de partículas, porque ahí está la clave del éxito, dibujé el capacitador de flujo ( flux capacitor) y les expliqué a detalle Volver al Futuro, porque me imagino que en 150 años las pantallas de Alta Definición de 50 pulgadas serán comparables con el radio de tubos que ocupaba el espacio de la sala en la casa de mi abuela.

La carta la escribí en papel hecho de plástico (para evitar biodegradación) y la próxima semana la hice emplasticar (porque esta semana no tuve tiempo porque pasado mañana salí de viaje). No hay manera de que pueda extraviarse en el tiempo. Entonces concluyo tres cosas:

1) Mis tataratataranietos encontraron la carta y no pudieron construir la máquina del tiempo. Esto habla muy mal de ellos, puesto que con el avance de la tecnología no es algo tan complicado. Además, si ellos no pudieron construir la máquina podían haber pasado esto a sus hijos y éstos a los hijos de sus hijos. Entonces, si nadie vino ayer, asumo que mis tataratataranietos no pasaron la carta a la siguiente generación. Odio a mis tataratataranietos.

2) Es probable que mis tataratataranietos hayan leído este post y que se enojaron por decir que los odio y por eso se negaron a visitarme. Odio a mis nietos por susceptibles.

3) Por otro lado, es probable que debido al Replanteo del Tiempo Universal que ocurrió en el 2073 (o en el ABF33214 RTU, si les gusta esa nomenclatura) no calcularon bien la fecha y viajaron dos años más adelante en mi vida. En cuyo caso, mis tataratataranietos tienen buen corazón, pero son muy torpes, por eso los odio.

También he considerado en la posibilidad que mis tataranietos no tuvieron hijos. Lo cual los hace muy estúpidos y deben ser colocados en la lista de personas a quienes odio. Ahora, es probable que haya muerto antes de tener hijos, en cuyo caso ninguna alma caritativa decidió cumplir el deseo de un difunto en una carta. Por lo tanto, odio al mundo.

domingo, 11 de octubre de 2009

Cristobal Colón

Hola!!!, pues bueno ya estamos octubre, como vuela el tiempo, verdad?, este post lo he venido preparando desde hace varias semanas, resulta que el increíble viaje de Cristóbal Colón (pilas con la tilde, no vayan a decir Colon…como al Hilton…idiotas!! el Colon, sin tilde, es parte del intestino grueso) no hubiera podido llevarse a cabo si el tipo hubiese tenido familia, es más o menos como ser delegado del comité, no puedes irte por el mundo a “trabajar” si tienes gente esperando en casa, por eso con mis años de experiencia como historiador y con un criterio muy científico he llegado a la conclusión que Cristóbal Colón:

¡¡¡ERA SOLTERO!!!

Si Cristóbal Colón hubiese tenido una esposa, habría tenido que oír:

-¿Y por qué tienes que ir tú...? y eso hubiera desmotivado el viaje, más que por la esposa por el simple hecho de que hubiera perdido tiempo valiosísimo buscando alguna excusa medianamente creíble.

-¿Y por qué no mandan a otro? ¿ tú eres el más tonto...?

-¡Todo lo ves redondo! ¿Estás loco o eres idiota...?

-¡No conoces ni a mi familia y vas a descubrir el nuevo mundo...! en este punto yo pienso hacer como Colón…

-¿Qué escondes? ¡Ni siquiera sabes a dónde vas...!

-¿Y sólo van a viajar hombres...? ¿Quién se lo va a creer...?. caramba que esta señora no sabe lo que es una salida de machos como esas tarde de partido (a las cuales no voy) o los atardeceres marlboro, o las salidas al cine entre machos…para…cazar hembras XD

-¿Y por qué no puedo ir yo si tú eres el jefe...?¡ a mí nunca me llevas de viaje...! ( ¿por qué será? )

-¡Desgraciado, ya no sabes qué inventar para estar fuera de casa!. -¡Si cruzas esa puerta yo me voy con mi madre!. ¡Sinvergüenza!.

-¿Y quién es esa tal María...? ¿Y qué Pinta...? ¿Y dices que es una Niña...? ¡Ándate a la mierda...!¡mentiroso!....y se vino a América, antes que los políticos la hagan mierda, llegó demasiado pronto este Colón.

-¡Todo lo tenías planeado maldito! ¡tú has quedado de acuerdo con esas putas indias!.(jeje)

-¿A mí me vas engañar...? ¿Qué la Reina va a vender sus joyas para que viajes? ¿Me crees tonta o qué? ¿Qué tienes con esa vieja?.

-¡No permitiré que vayas a ningún lado! ¡ siempre te las arreglas para dejarme sola!

-¡No va a pasar nada si el mundo sigue plano!.

Así que no te vistas que ¡¡¡ no vas...!!

Para quienes disfrutamos de la civilización es muy agradable saber que podemos disfrutar de todo esto porque hubo un hombre valiente que dijo no a los lazos asfixiantes del matrimonio, viajó, conoció, recorrió medio mundo y como recompensa descubrió un nuevo mundo lleno de mujeres en topless…más o menos como cuando me fui a canarias

Nota cultural: Cuando Cristóbal Colón partió de la parte continental de España hizo una parada en las islas Canarias para abastecer las carabelas, de hecho hay un monumento en la parte del puerto donde desembarcó, de ahí siguió su camino hacia “las indias” (pendejo) y se encontró con mujeres en topless, cuando viajé al curso en España primero fui a la parte continental para luego tomar un vuelo hacia las islas y encontrarme con mujeres en topless…se nos han invertido las cosas Colón, eh?

martes, 6 de octubre de 2009

Cronicas de ex novias Parte 1: El primer amor, la rockera y la loca

Lástima que no fuiste así

A manera de prologo quiero contarles que hace unos días en esas conversaciones anecdóticas, en las que se recuerdan los disparates que se han dado a lo largo de nuestras vidas tocamos el tema de las novias, aquellos seres con los que se pasa un tiempo y que en ocasiones (muy pocas a decir verdad) sientes que valdrá la pena y decides hacer algo más que solo pensar en ti, por razón de espacio y tiempo es posible que no me acuerde de todas, las que falten pues…quiere decir que no me importaron lo suficiente como para que las recuerde…así que de malas, y las que menciono pues…espero que no me guarden rencor. En esta primera parte no he respetado ni cronología ni sentimentalismos, tan solo están dentro del top 20 de las más absurdas, el orden que les dé es netamente cómico, así que no se emocionen.

Un factor común entre las novias es que al principio todas parecen “lindas y tranquilas ovejitas”, para con el tiempo convertirse en psicóticas, neuróticas, estrambóticas recién salidas del Lorenzo (menos tú cielo, tú eres especial). Uno de los limitantes al momento de decidirme por una relación “seria” es todo lo que me ha pasado en otras relaciones “serias” y es que como alguien me dijo por ahí “me han pasado muchas cosas extrañas”.

Recuerdo hace muchos años en la época del escuela había una chica que me gustaba, era cachetona, su cabello, su sonrisa, lo linda que era (tenía menos de 10 años no esperen que le vea los senos o caderas…porque de hecho no tenía) su sonrisa era mi sonrisa, su luz era mi luz, en aquellos años corrían por mis venas muchos sentimientos y mucha estupidez, sí sentimientos y estupidez la peor combinación que puede tener un pre púber que se acerca a los azarosos caminos de las relaciones sentimentales, y es que lo último que se necesita en el momento de empezar las relaciones sentimentales es: estar lleno de sentimientos. Pero nada es eterno y la relación acabo tan fugazmente…en un evento de navidad, cuando ella fue elegida pastorcita y yo angelito, es impensable que una relación entre un ángel y una pastora pueda llevarse a cabo, así que todo terminó ahí. Años más tarde ya en el colegio la volví a encontrar en aquellos caóticos juramentos de bandera colectivos, a mi la adolescencia me estiró y ya no era el enano que ella conoció, a ella la grasa de los cachetes le creció y se le fue a los pechos y a las caderas, aunque no llenó por completo mis expectativas en conjunto no era nada despreciable, menos aun en aquellos años en los que con mis amigos carecíamos de un criterio demasiado exigente (eso lo ganamos después), fue a esta edad donde desarrollamos el criterio de: “no hay mujer fea, solo belleza rara” (que por cierto cada día se aplica menos). Después de varios encuentros, varias llamadas por teléfono hasta tarde, la relación fue concretándose, pero no era el momento y aquello que no fue aprobado por el destino, no puede darse, la relación entre el angelito y la pastorcita no pudo ser.

En aquellos años locos del colegio y peor aun con la calidad de amigos que me conseguí las cosas podían ser todo menos normales, en este articulo no incluiré las relaciones que se dieron en una fiesta, fin de semana, reunión, sala de espera, bus interprovincial, campamento, taller, curso, iglesia, dependencia pública, etc, etc…

Una relación memorable y catastrófica fue la que tuve con Raquel (nombre protegido) una rockera, y esto seguramente sorprenderá a muchos, se dio en una de esas salidas donde nos queríamos comer el mundo, como dicen: polos diferentes se atraen, la relación iba bien y podríamos decir que era una relación normal (dentro de lo que cabe) cierto día me invitó a un concierto a rock, y yo dije pues bueno vamos, al principio la música moderadamente chévere, y llegaron los amigos y las amigas, mi vestimenta completamente de negro con piercing incluido (debía mimetizarme), una de ellas me dijo: mosheas?? Y yo: pues claro, al rato todo el mundo corría en ronda, era una nube de polvo y rostros que se movían a velocidades vertiginosas, delante de mí una nube de greñudos y greñudas que se empujaban, golpeaban y gritaban, en la boca, el primer golpe que me dieron fue en la boca, luego uno en el estomago y mis piernas sintieron el sabor de un verdadero mosh…carajo!! Al final un sabor a sangre, unos cuantos moretones y una relación menos, me divertí…creo.

Lo peor de salir con una chica religiosa (testigo de Jehová, católica, cristiana evangélica, adventista, musulmana, atea, maradoniana, etc) es que inevitable, indudable e invariablemente querrá convertirte, no importe si ello le lleva toda la vida, utilizará todos los recursos a su alcance para que te conviertas, incluso (este me encanta) te dice que es el diablo quien no deja que su amor se consume, que es el diablo quien hace que la rechaces a su religión y por ende a ella (¿?). Siempre he mantenido una postura ecléctica y puedo no creer en lo que mi novia cree, pero lo respeto y la apoyo en su creencia sin que eso signifique que la aceptaré como mía, parte de ese apoyo implica acompañarla a los diferentes eventos que tenga en su iglesia/secta o iglesias/sectas amigas, cierto día me pidió que la acompañe a una iglesia a una presentación, superé mi aversión a las iglesias, pero me encontré con un pastor bastante “especial” al rato empezó a llamar a aquel joven que no ha recibido a Cristo en su corazón, y yo miraba para los lados, después dijo que aquel joven que salvará vidas debe tener a Jesús en su corazón, en este punto me empecé a preguntar si había alguien más que estudiara medicina y que estuviera en el mismo lugar, al rato dijo ese joven que estudia medicina y está de azul, vamos que este mas que pastor le hubiera valido ser adivino y yo seguía buscando a mi futuro colega que para colmo tenía los mismos gustos en colores que yo, más le vale, porque es bastante feo ser un científico descreído como para tener mal gusto en ropa eso sería el colmo, al rato aquel pastor-adivino-brujo dijo que debía pasar adelante aquel joven que no ha recibido a Cristo Jesús en su corazón, quien sigue medicina, está vestido de azul y está en la fila izquierda…mierrrrda…lo primero que pensé que alguien me estaba copiando, lo segundo que pensé fue cuan pequeño es el mundo y lo tercero fue que esa relación debía terminar…la respuesta fue simple: lo lamento el diablo me obligó a esto…obviamente por medio tuyo al quererme convertir a patadas, aprendido esto aprendido todo, no me quiero aventurar a salir con una musulmana y despertarme un día con un chaleco explosivo o enterarme que cambiamos la salida al campo por ir a perseguir niños cristianos, o que en lugar de ir al cine nos vamos a inmolar en la matriz de telmex, aunque esto último lo haría sin ningún motivo espiritual de por medio. Pero como el hombre es el único animal que se tropieza dos veces con la misma piedra volví a caer con la cristiana loca, y un día me dijo que nuestra relación no podía ir mas porque Dios le había hablado y que ella una hija de dios (ojo con la minúscula) no podía estar con un demonio que no puede aceptar la religión, ahora viéndolo en perspectiva me parece gracioso, y me impresiona que el buen Dios (el original) pueda hablar con un ser humano normal sin arbustos en llamas, ni luces, ni voces retumbando desde el firmamento, ni nada…y si bien nunca creí de forma literal lo de hija de dios, supe al instante que si era una hija…una hija de…desde ahí juré no meterme otra vez con una religiosa loca…hasta ahora voy muy bien.

Continuará…