domingo, 9 de octubre de 2011

Desacelerando

Este episodio de mi vida se llama: análisis

Hace poco una gran amiga me dijo: “espero que algún día empieces a ver a las personas como seres con emociones y sentimientos y no como simples objetos para tu diversión”.

En el momento no le di importancia y lo archive como tantas cosas que nos dicen o decimos a lo largo del día, pero al final en el recuento de lo vivido, escuchado, visto y aprendido me queda el mal sabor de estar perdiendo la perspectiva, que tal si tiene razón, que tal si en cierto punto he empezado a despersonalizar a quienes me rodean y he dejado de verlos como humanos perfectamente imperfectos, debo admitir que dentro de mi saco de errores y defectos está, invariablemente, la tendencia a medir a todos bajo mis principios y la arrogante concepción de una regla de comportamiento, al final solo me siento un imbécil más del grupo de imbéciles que alguna vez, lejana en mi memoria, juré combatir.

En los últimos meses muchas cosas han cambiado, he sido golpeado de maneras que no había imaginado o creído posible, al menos no para sentirlas en mi piel, he recibido noticias malas, he debido tomar rutas alternas para alcanzar mi norte, he aprendido variaciones en el concepto del amor, el desamor y la indiferencia, he ganado experiencia de todo ello, se han dado cambios trascendentales y he caminado por un sendero que, aunque quiero, siento que no voy a poder deshacer, he perdido y ganado batallas, he huido a conflictos que en su momento sobrepasaron mi capacidad de respuesta, he ganado guerras, me he enfrentado a rivales gigantes y, de alguna manera mágica, ahora son mis aliados y quizá en algún punto del futuro pueda decir que son mis amigos, mi concepción de muchas cosas ha cambiado de manera drástica, he vivido cambios, cambios que no busqué, cambios que por varios años viví rechazando y que al final, por una acción ajena, terminaron alcanzándome.

Infantilmente pensaba, o me gustaba pensar, que el mundo tenía muy definido lo bueno y lo malo, lo blanco y lo negro, lo claro y oscuro, me gustaba pensar que el lado bueno debía siempre prevalecer, supongo que eso nos venden en cada historieta y en cada película, cuesta acostumbrarse a la idea que hoy por hoy el mundo, para mi, se pinta de un hermoso color gris, con sus notas de colores en algunos lugares, sus partes sombreadas en otros lugares, escala de grises en algún punto del horizonte, pero gris.

Es bastante frustrante que con toda la capacidad de la que hago alarde me tenga que detener para ver cosas tan obvias, en principio pensé que era porque soy un tonto con suerte, pero la suerte al final no existe y me resumo como un tonto que va rápido…demasiado rápido, ese afán de alcanzar mi norte me ha hecho que avance por la vida y por las experiencias a velocidades demasiado altas, me estoy perdiendo el sabor de las cosas, de lo bueno, de lo malo, no basta con resumir un mundo gris y seguir…es importante entender porque, al menos para mi, adquiere ese tono. Es importante poder sentir las derrotas porque solo así se puede tomar nota para alcanzar la victoria, es importante sentir el sabor metálico y dulce de la sangre porque es una perfecta manera de recordar que a pesar de tanta maravilla, aun se es humano, son importantes muchas cosas que pasamos por alto y es muy importante saber cuando simplemente desacelerar.

domingo, 14 de agosto de 2011

Los besos que no di

Este episodio de mi vida se llama arrepentimiento

No me arrepiento de los besos que he dado, en su momento, cada uno de ellos tuvo un motivo, una pasión, un anhelo, una intención, si hay que arrepentirse de algo, cosa que hago muy poco, me arrepentiría de los besos que no di, aquellos que se congelaron en las ganas, los besos con intención que frenaron en el aire, a centímetros o terminaron enredándose en el cabello de quien los recibiría. Arrepentirme de algo es algo muy extraño, cada error ha sido una enseñanza, y he tenido cuidado en que mis errores no afecten a otros, pero haber tenido cuidado no quiere decir que no haya pasado, y ahora en el recuento de avance y de daños me arrepiento haber lastimado a esas personas, pero no me arrepiento de las decisiones que tome porque todo ello me ha traído a ser lo que soy, y me gusta como soy.

Me arrepiento del beso que no di una lejana mañana de enero, un beso que hubiera marcado un punto de inflexión en mi vida y en la suya, mis ansias de triunfo y el sabor nuevo de la libertad y los viajes nublaron mi juicio o quizá lo definieron, lo cierto es que aquel beso nunca llegó, nunca más volví a verla, no hubieron promesas, no hubieron más planes, no hubieron las dulces palabras que hablan de futuro, esperanza y encierran un tal vez nos encontraremos, sin ese beso el único lugar que hubo fue para la nada. Ahora está mejor, ahora es feliz, lejos de lo que no pude dar, lejos de lo que no pude prometer, lejos de mis ansias de volar, lejos de mis deseos de salir de aquí y no regresar.

Me arrepiento del beso que no di una noche de abril, me arrepiento de no haber advertido la despedida que se enmarcaba en cada una de sus palabras, me gusta pensar que nunca hubo aquel beso porque me negaba a que se fuera, me negaba que no la volvería a ver, me negaba que pasarían tres meses y no la volvería a ver, durante ese tiempo todo seguía normal, vivíamos por nuestro lado y cada tres meses la magia continuaba, las conversaciones se estiraban, las risas se desbordaban, pero nunca pude despedirme, nunca se pudo poner punto final, nunca se pudo decir palabras de esperanza, de volvernos a encontrar algún día, ahora que lo pienso quizá nunca se despidió, nunca nos despedimos, porque ninguno de nosotros quiso decir adiós, ilusamente me atrevo a pensar que cuando no hay despedida es porque no hay final.

Ahora, estoy cercano a un beso que no daré, que no sé si me arrepienta en el futuro, no sé si me pese en el alma más que su ausencia porque no marcará un fin, no sé si habrán palabras que hablen de futuro, sueños y esperanzas, ahora es diferente, quien quiere besar busca la boca y quien ha fallado debe besar, quizá con la oscuridad de la noche el arrepiento me golpee, pero será demasiado tarde para echarse atrás, demasiado tarde para aplicar correctivos, demasiado tarde para enmendar, y no rectifico mi camino porque sé que la rectificación no me corresponde a mi, y que cuando el momento llegue, lo contaré como otro beso que no di.

viernes, 29 de julio de 2011

Saudade

Decimos te amo con una facilidad que impresiona, decimos te odio como si fuese un buenos días, al final nuestras palabras flotan por el aire y llegan a nuestro destinatario original así como a destinatarios infiltrados…no puedo decir que te amo, pero me contengo al decir que te odio, porque amor y odio no son opuestas, si llegase a odiarte sería que siento un poco de amor, amor frustrado, amor intermitente, amor con miedo, pero amor al fin de cuentas. Lo único opuesto al amor es la indiferencia, el saber que existes pero que no signifiques más que alguna desconocida en un país lejano de lengua extraña a quien Destino nunca me llevará a conocer.

A lo lejos en mi memoria suena un poema de Neruda, mi cerebro automático y mi corazón necio no saben trabajar en equipo, por eso, para poder coexistir debo silenciar a uno de ellos, y darles la oportunidad de expresarse de manera alternada y en situaciones controladas…pero hoy gana Neruda.

Y ya no confío en tus palabras, miro tus ojos infinitos y mi reflejo luce turbio y lejano, distante, ajeno, extraño. Debo pensar más y sentir menos, me lo repito a cada instante, pero el huracán de emociones, ideas y sentimientos hacen casa en mi ser y no puedo ordenarme.

Y el te amo queda grande, se cae, se ensucia, no encaja, no es merecido, no sé si te amo…no sé si te pienso, quizá de tanto pensarte recuperes un fragmento de lugar en mi vida, en mi corazón, dentro de mi fortaleza…pero lo cierto es que no te odio, prefiero sentir indiferencia antes que odiarte, porque al odiarte será un amor con coraje y sentir coraje por tu alma cálida es una culpa tan pesada que nunca podré soportar, aun cuando seas tú quien la ha causado.

En ocasiones como esta siento que te alejo y una parte dentro de mí se alegra, quizá de esta forma el mundo continua, el universo sigue su curso y nuestras vidas prosiguen en su trayecto, pero existe otra parte de mí que no te quiere lejana y que cruzaría el mundo entero para sentir tu calor y la magia que, a pesar del tiempo y las circunstancias, sigue emanando de tu mirada.

Mientras trato de hacer que la vida continúe, mientras tratas de recuperar todo lo que has perdido, mientras se hacen esfuerzos por cruzar este abismo que hay entre nosotros, me doy cuenta que no hay nada que pueda prometerte, que no hay nada que pueda asegurarte y que, tristemente, no tengo una luz para guiarte. Al final de todo solo en el aire queda flotando un te quiero, quizá por los recuerdos, quizá por querer creer lo que dices, quizá por tus lágrimas, quizá porque siempre te he querido.

Neruda acorta sus pasos y sus letras se hacen traslucidas, casi invisibles, a lo lejos suena una melodía en lengua extraña y regresas a mi mente, como describir este momento, me pregunto mientras pienso que pasará mañana o la semana que viene, y aquel poema portugués se escurre entra mis pensamientos, saudade: la tristeza por los recuerdos alegres, recuerdos que están en tus manos para darles vida nueva y traerlos a esta realidad.

sábado, 23 de julio de 2011

El gusanito

Hoy les quiero comentar sobre algo que está presente en muchos parques de la ciudad de Guayaquil, y de forma característica en zonas al sur y suroeste de nuestra querida ciudad, algo que tiene ruedas, lleva pasajeros, cobra una determinada cantidad por su uso, pero no es un medio de transporte. Hoy les quiero comentar sobre el gusanito

Que mente perversa, mal intencionada y de doble sentido le pone “el gusanito” por eso uno se extraña que en determinado momento una chica grita “uy sí, me encanta treparme al gusanito” pero ¿que es eso? A qué tipo de aberración nos enfrentamos como sociedad, entonces es lógico que si desde niños viven con el doble sentido de grandes serán bloggeros, tuiteros…o ambos!!!

Algo que me llama mucho la atención es que sin importar el tamaño o el lugar en donde recorre el gusanito, siempre suenan vallenatos, es preocupante…quiere esto decir que tanto colombiano que entra a nuestro país lo hace para ponerse un gusanito, porque es eso o una panadería. Pero volviendo a lo del vallenato, ¿Por qué vallenato? ¿Qué les pasa a los conductores de el gusanito? ¿Será acaso que viven deprimidos?, entonces, con nuestros niños trepados en el gusanito con vallenato a todo volumen no es de sorprender que tengamos tanto emo suelto.

Ahora hay interrogantes que yo tengo con respecto esto del gusanito:

¿Tienen SOAT?

¿Para ir de su casa al parque y del parque a su casa se van debajo de la tierra o usan las calles?

¿Las multas por no tener cinturón de seguridad, son por cada carrito del gusanito o por todo el gusanito?

¿Por qué el gusanito tiene tantas luces, en su vida pasada fue ovni, o chongo?

¿Por qué hay gusanitos azules, les falta oxígeno?

¿Las chivas son la versión del gusanito para adultos?

jueves, 23 de junio de 2011

La salsa y yo

Quienes me conocen saben que no le hago al baile, el señor todopoderoso, creador del cielo, la tierra, la comida italiana y CEO de la Sony decidió que yo debía venir a este indigno planeta con dos pies izquierdos y ser absolutamente derecho, pero, emprendedor como soy (léase terco) decidí entrar a un curso de salsa…de hecho, el curso tiene una hora previa de “ritmos varios” pero por “ritmos varios” entenderemos que el profesor, un tipo bajo, carismático, ex politécnico y de sexualidad dudosa se la pasa bailando y haciendo movimientos que, nosotros, principiantes en ese tipo de menesteres nunca realizaremos, así que la hora de “ritmos varios” adquiere otro significado al ver el grupo que se mueve de miles de formas, pero ninguna se acerca a la forma en que se mueve el instructor.

Como en todo curso hay compañeros y compañeras, un gordito con muchos kilos de más que solo asiste a ritmos varios y pide encarecidamente un solo tipo de canción, un tipo de fanesca auditiva en la que solo se entiende la palabra blanco; una señora de mediana edad que no obedece ninguna de las indicaciones del instructor, lo que me lleva a preguntar ¿a qué chucha va?; dos chicas simpáticas que se esfuerzan en seguir los pasos del instructor pero con muchas más buena voluntad que éxito; y por último una chica que está más buena que el pan, con una cintura fina, labios gruesos, flexibilidad notable, pecho generoso, trasero firme y lentes de contacto…sí, es una acomplejada, pero bueno nadie es perfecto y desde chiquito me enseñaron a no discriminar.

Ya puestos en lo que nos ocupa: la salsa, debo admitir que no es tan difícil como parece, todo es cuestión de saber los pasos y saber contar hasta 8, eso sí, el número 4 y el 8 son como la h, es decir, mudos, por eso los pasos se cuentan: un, dos, tres mmm cinco, seis, siete mmm y así otra vez, fácil, ¿verdad?

Pero lo mejor del curso son los nombres de los pasos, aquí uno puede darse cuenta que la salsa es por y para tipos originales, dónde sino encontraríamos pasos como

“el básico” pues es el paso básico de salsa, donde se hace el pie izquierdo para adelante, luego regresa a su sitio y el derecho se va para atrás, siendo el izquierdo el 1, el derecho el 5, a que no es pan comido, si no les digo que esto de salsa es sencillísimo.

“el palao” este paso derrocha originalidad, con el cual nos podemos mover palao, que en idioma sabroso seria “para un lado”

“propio terreno” a que no adivinan como es este paso, pues, básicamente consiste en marchar, subir y bajar los pies en el mismo sitio, eso sí contando siempre: un, dos, tres mmm, cinco, seis, siete mmm

“Pa atrás” eh…sin comentarios

“lateral” utiliza el mismo principio de desplazamiento que el “palao” pero alterna el movimiento de los pies, es en este paso en el cual extraño que la evolución nos haya quitado la cola o que el buen dios no nos haya hecho una tercera pierna.

Finalmente ser el único hombre del curso tiene sus regalías, toca turnarse para bailar con las chicas, al final de la clase soy al que más le sacan la madre, pero tener así de cerca a esas ricuritas vale la pena.

Cierta vez dije que científico que se respeta no baila, y que el baile es una expresión vertical de una frustración horizontal, pero como todo científico creo en la evolución y en la necesidad de adaptarse al cambiante mundo del siglo XXI, hasta mientras toca seguir evolucionando al ritmo de un, dos, tres mmm, cinco, seis, siete mmm…

lunes, 11 de abril de 2011

Distancia...

Tomar distancia puede ser tan necesario para un enfoque como para un reenfoque, distanciarse demasiado puede, por el contrario, producir un desenfoque. Al final todo radica en dosis, cantidades, mediciones, cálculos, ideas y porque no, su forma de medirlos o de expresarlas.

Desde el espacio la esfera azul flota tan pacifica, tan calmada, a la distancia suficiente para que nuestro campo visual la tenga contenida por completo, parecería que nada se moviera, a esa distancia nada puede salir mal, a esa distancia es mucho más apacible, pero no menos inquietante.

Usualmente las personas debemos hacer paréntesis en nuestras vidas, en vidas más agitadas y frontales es necesario no un paréntesis sino un punto y aparte, al volver todo a la normalidad podemos darnos cuenta que vemos nuestra vida, nuestro mundo y todo cuanto en el existe de una manera más clara, más amplia, como si le hubiéramos realizado un lavado de cara mental y sabemos, quizá por vez primera, que los paradigmas infranqueables que nos hicieron alejarnos son ahora simples detalles sin mayor importancia que pueden solucionarse de un plumazo.

Hace varias semanas me encontraba sentado en el comedor de la empresa, sumido en mis pensamientos, haciendo malabares con varias ideas, cuando sin notarlo una persona se encontraba junto a mí, intentando entablar una conversación

– ¿que estamos haciendo? - preguntó -.

Sin saber a qué se refería contesté que tomando la hora de descanso de la comida, y, pensando que pretendía echarme, le dije que pensaba tomarme toda la hora porque igual la empresa me descuenta esa hora del sobretiempo, sonrió de una forma cálida, entendiendo que no había comprendido su pregunta, y con una paciencia que solo reserva para sus estudiantes contestó:

-Me refiero a que estamos haciendo de manera global en esta empresa.

Pues yo atiendo enfermos y heridos, atiné a contestar de manera rápida, aún cuando en mi interior sabía que su pregunta iba más allá de lo que pensaba, -¿que más?-, inquirió, como sospechando que yo tenía la respuesta que él buscaba, pero no se la quería dar, nada más, contesté, tratando de negarme a participar en una sesión de preguntas y respuestas sin sentido, sonrió con una gran carcajada que abarcó todo el comedor, luego, de una forma amistosa puso su mano sobre mi hombro y como si me contara una confidencia dijo: “muchacho, aquí estamos construyendo un puente, un puente, ¿sabes lo que significa eso?”, pretendiendo ser un poco simpático, contesté que significaba que la ciudad ya no sería un caos a las horas pico, sonrió cálidamente otra vez, y como si fuese una de sus clases empezó a hablar de forma pausada, asegurándose ser escuchado.

-“Construir un puente es hermanar, unir comunidades, es extender una línea de comercio, comunicación y paz, construir un puente es agilizar el progreso de dos ciudades, suministrarle sangre nueva, oxigenar sus componentes más esenciales, quién vive cerca de un puente nunca tiene una vida aburrida y quienes construimos puentes nunca dejamos de aprender”-, cada palabra suya iba acompañada de expresiones con sus manos, como si dibujara en el aire cada cosa que decía, por momentos sus ojos se perdían en el techo, pero parecían ver mucho más allá, parecían viajar en el tiempo y espacio a su salón de clases, al que, como aseguró días antes, debía en algún momento regresar.

-¿Conoces la historia del constructor de cercas?-, preguntó, pero sin esperar mi respuesta comenzó: Es es la historia de dos hermanos que vivieron juntos y en armonía por muchos años.
Ellos estaban en granjas separadas.
Un día tuvieron un conflicto. Comenzó con un pequeño malentendido y fue creciendo hasta que explotó en un intercambio de palabras amargas seguido de semanas de silencio.
Una mañana alguien llamó a la puerta de Luis.
Al abrir la puerta, encontró a un hombre con herramientas de carpintero:
- "Estoy buscando trabajo por unos días -dijo-; quizás usted requiera algunas pequeñas reparaciones aquí en su granja y yo pueda ser de ayuda en eso".
"Sí" -respondió el mayor de los hermanos-, tengo un trabajo para usted.
Y explicó:
- “Al otro lado del arroyo, en aquella granja, vive mi hermano menor. La semana pasada había una hermosa pradera entre nosotros pero él desvió el cauce del arroyo. Él pudo haber hecho esto para enfurecerme, pero le voy a hacer una mejor".
Y continuó:
- “¿Ve usted aquella pila de desechos de madera junto al granero? Quiero que construya una cerca de dos metros de alto, no quiero verlo nunca más."
El constructor le dijo:
- "Creo que comprendo la situación".
El hermano mayor le ayudó al carpintero a reunir todos los materiales y dejó la granja por el resto del día para ir por provisiones al pueblo.
Cerca del ocaso, cuando el granjero regresó, el constructor justo había terminado su trabajo.
El granjero quedó sorprendido. No había ninguna cerca de dos metros. En su lugar había un puente que unía las dos granjas a través del arroyo. Era una fina pieza de arte, con todo y pasamanos.
En ese momento, su hermano menor, vino desde su granja y abrazando a su hermano mayor le dijo:
- "Eres una gran persona, mira que construir este hermoso puente después de lo que he dicho y hecho...”.
Estaban en su reconciliación los dos hermanos, cuando vieron que el constructor tomaba sus herramientas.
- "No, espera, quédate unos cuantos días, tengo muchos proyectos para ti", -dijo el hermano mayor al constructor-.
- "Me gustaría quedarme -respondió el constructor-, pero tengo muchos puentes por construir...".

Una vez concluida su historia pareció regresar a este planeta, me miro de una forma paternal diciendo: -¿Entiendes ahora cuán importante es construir un puente?, seguramente tu futuro no está aquí, con tu edad debes tener más aspiraciones, metas y planes, pero donde vayas habrán puentes que construir, aún cuando te pidan, o sea lo más sano o fácil, construir murallas, se levantó y encendió uno de sus cigarros chinos, me dio un par de palmadas en la espalda y se fue.

Ese y varios momentos más han quedado galvanizados en mi memoria, están dentro de mi mente como un poco de lo mucho que he aprendido en este paréntesis que ya está por cumplir seis meses. Con un criterio mejorado, con una óptica más amplia, comprendiendo, por fin, las palabras de una gran amiga: “no queremos que la situación cambie, queremos que la situación mejore”. Creo que es tiempo de empezar a alistar todo para volver.

domingo, 27 de febrero de 2011

El futuro de la patria

Es bastante escuchado que los jovenes son el futuro de la patria, y de hecho es una frase que si bien no acierta al 100% podriamos ponerla en un 50 - 50 ya que sí son el futuro, pero también son gran parte de nuestro presente...pero que pasa cuando nuestros jovenes no dan la talla para los retos del día a día, o peor aún, que pasa cuando a puertas de la universidad no saben ni que hacer, ni que seguir...?

Una valiente reportera ha decidido entrevistar a un "futuro de la patria", conocer el criterio, las metas, y la forma en que ve el mundo un joven de 17 años, que está por terminar sus estudios secundarios y que además pertenece a una organización de trabajo con jovenes.

Nota editorial: es una transcripción fiel a la original, no se ha cambiado absolutamente nada, incluso, no hemos corregido las faltas ortográficas.

[04:49] Reportera infiernillo: y como te va? ya saliste del cole?
[04:50] Entrevistado: no me falta este año y ya salgo
[04:50] Reportera infiernillo: q chevere, y q piensas seguir n la u?
[04:51] Entrevistado: 3 carrera
[04:51] Entrevistado: sicologia
[04:51] Entrevistado: telecomunicacion
[04:51] Entrevistado: y comercio exterior
[04:51] Reportera infiernillo: oh... pero como asi psicologia?
[04:52] Entrevistado: mmmmmmmmmmmm
[04:52] Entrevistado: xq ya soy sicologo de la vida me falta solo el titulo y xq me gusta ayudar a las persona
[04:53] Reportera infiernillo: jajajaja!! aaaah en seerioo?
[04:53] Reportera infiernillo: jajaja yo estudio psicologia y creeme que no es tan sencillo
[04:53] Entrevistado: encerio
[04:53] Reportera infiernillo: si
[04:54] Reportera infiernillo: ya voy a segundo año
[04:54] Entrevistado: a q bien
[04:55] Entrevistado: pero es facil un amigo ya esta en lo ultimos año y si se lo ve facil
[04:55] Reportera infiernillo: jajaja... preguntale lo q tuvo q leer y aprender para llegar a donde esta
[04:55] Reportera infiernillo: si quieres una carrera vaga busca algo como derecho
[04:55] Reportera infiernillo: mas a vaca no puede ser
[04:57] Entrevistado: no no me gusta eso
[04:57] Reportera infiernillo: jajaja es que si te gusta por facil te lo pongo mas facil aun
[04:57] Reportera infiernillo: psicologia no es solo ponerse a escuchar a los demas y "ayudar a la gente", implica muchas cosas mas
[04:58] Entrevistado: si leer muxos libros
[04:58] Entrevistado: q te pone analisar muxo
[04:58] Entrevistado: si es un poco fregado pero si me gusta hay q darle duro para ser lo q me gusta
[04:59] Reportera infiernillo: hmmm, bueno y telecomunicaciones?
[05:01] Entrevistado: a xq me gusto de locucion
[05:02] Reportera infiernillo: oh
[05:02] Reportera infiernillo: y tienes buena voz?
[05:03] Entrevistado: me dijieron q si
[05:03] Reportera infiernillo: ya has estado antes en cabina de radio? o animando o algoo asi?
[05:04] Entrevistado: si en radio dos veces
[05:05] Reportera infiernillo: oh vaya...pero oye tengo entendido q eso es counicacion social
[05:05] Reportera infiernillo: no telecomunicaciones
[05:05] Entrevistado: aja
[05:05] Reportera infiernillo: jajaja y entonces? que mismo vas a seguir?
[05:05] Entrevistado: pero es con comunicacion
[05:05] Entrevistado: jajajajajajajajaja
[05:07] Reportera infiernillo: jajajaja no entiendo q mismo piensas seguir?
[05:08] Entrevistado: aver para ser sicologo para ser locutor y para ser algo de comercio exterior
[05:09] Reportera infiernillo: oooh ya, entonces telecomunicaciones ya no?
[05:10] Entrevistado: vale
[05:10] Reportera infiernillo: y comercio exterior, como asi?, por que?
[05:11] Entrevistado: xq es mi carrera de colegio
[05:11] Reportera infiernillo: de colegio?
[05:11] Reportera infiernillo: t dieron comercio exterior en el colegio?
[05:11] Reportera infiernillo: en q colegio estudiaste!!!
[05:12] Entrevistado: estoy estudiando en el pablo annibal
[05:13] Reportera infiernillo: ya...y ahi t dan comercio exterior?
[05:14] Entrevistado: si
[05:15] Reportera infiernillo: y de q va eso? que es el comercio exterior?
[05:17] Entrevistado: a tratar de trabajo en lo q es empresa q no solo este aqi en ecuador y en otras partes otros paises
[05:17] Entrevistado: y todo eso
[05:17] Reportera infiernillo: oh chevere, y eso t gusta o no?
[05:18] Entrevistado: aja
[05:20] Entrevistado: si es xido
[05:24] Reportera infiernillo: oye y como t visualizas d aqui a 5 años, osea como te ves ?
[05:25] Entrevistado: mmmmmmm
[05:25] Entrevistado: estudiando y trabajando
[05:25] Reportera infiernillo: pero en que? estudiando que ? trabajando en que ?
[05:27] Entrevistado: aver ya terminando ya mi carrera de sicologia y trabajando nose de lo q haiga
[05:27] Reportera infiernillo: oh...y como piensas ir estudiando... una por una o las 3 juntas?
[05:27] Reportera infiernillo: debes organizarte
[05:28] Entrevistado: a una por una
[05:28] Entrevistado: xq no boy a poder con dos carrera de una
[05:28] Reportera infiernillo: hmmm claro, organiza tus prioridades
[05:29] Entrevistado: aja
[05:29] Reportera infiernillo: pero no crees q mejor t fuera en comercio exterior primero? por lo q estudias
[05:29] Entrevistado: xq yo me tengo q pagar la u x eso no boy a tener tanto tiempo para las dos
[05:29] Entrevistado: mmmmmmm si me an dixo pero no me llama tanto la atencion
[05:30] Reportera infiernillo: fuera mas factible creo yo >.>>
[05:31] Entrevistado: si pero q mas da
[05:32] Reportera infiernillo: psicologia te costara mas
[05:32] Entrevistado: como aver decime
[05:32] Reportera infiernillo: por filosofia, por la estructura de la carrera, bueno es una sugerencia es todo
[05:32] Reportera infiernillo: quiza te salga mejor si estudias primero lo que te conviene mas, eso es armar un plan de vida q funcione
[05:33] Entrevistado: si hay q darle arto ñeqe
[05:34] Reportera infiernillo: y para cuando piensas ser locutor?
[05:34] Reportera infiernillo: a eso tb hay q dedicarse desde joven
[05:34] Entrevistado: si a lo q termine lo de sicologia
[05:34] Reportera infiernillo: jajaja no estabamos en el comercio exterior? jajaja me hice bolas jajaja
[05:36] Entrevistado: aver primero voy a escoger sicoloco y hay comunicacion
[05:38] Reportera infiernillo: oye tu que estudias comercio exterior en el cole, explicame q es eso del alba
[05:40] Entrevistado: alba mmmmm
[05:40] Entrevistado: no ni idea
[05:41] Entrevistado: no creo q me aya enseñado eso
[05:41] Reportera infiernillo: oh... y lo del alca? es q eso me han dicho q tiene q ver, bueno basicamente es comercio internacional, debe ser lo mismo o no?
[05:42] Entrevistado: eso mas se lo estan enseñando a los xicos q estan en el 1 simestre
[05:42] Reportera infiernillo: del ultimo año?
[05:42] Entrevistado: es lo mismo
[05:43] Reportera infiernillo: oh yaaaa, bueno ya he de googlear
[05:43] Reportera infiernillo: es que me daba pereza jajaja
[05:43] Entrevistado: jajajajajajajajajjajajaja

Desde el infiernillo estamos concientes que no todos (as) son iguales, pero, ¿con este tipo de referencias que futuro podemos esperar para la patria?

miércoles, 2 de febrero de 2011

El tiempo

Desde el inicio del tiempo existe una entidad que controla, dirige, regula y “caotiza” nuestras vidas…no amigos, esta vez no son las mujeres, es un poder que va más allá, que envuelve el todo y pertenece a la nada, los humanos, seres mortales y muy necios lo hemos llamado: tiempo.

Es que el tiempo se ha convertido en uno de nuestros mayores dolores de cabeza, pero ¿cuándo exactamente empieza eso?...a los 8 años, y es que a los 8 años, en el día de tu cumpleaños, cuando ansias con todas tus fuerzas que te regalen una tortuga ninja con todas sus armas y que además venga con el carro, aparece tu madre con un regalo chiquito, una cajita, una cosita que la miras y dices: “aquí no creo que quepa una tortuga ninja…si acaso el caparazón, pero sin piernas ni brazos”, mientras mamá te mira con cara radiante y sonriente y mientras te abraza y te dice feliz cumpleaños te incita a que abras ese regalo, empiezas a sentir el peso, abrirlo despacito, solo piensas: “señor por favor que no sea una tortuga ninja descuartizada”. Pero te topas con algo inimaginable, impensable, increíble…inútil: un reloj con alarma.

Ya dado al dolor te empiezas a preguntar: ¿y yo para qué carajo quiero un reloj con alarma?, después te das cuenta que tiene cronometro y es ahí cuando el mundo cambia…porque a partir de ese momento todo lo que pasa lo cronometras, que no te gusta bajar la basura…no importa, viene tu madre y te dice: “bájala que te llevo el tiempo”, y es como que algo se activa en tu cabeza agarras la funda y empiezas a correr por las escaleras, saltas de dos en dos los escalones, esquivas al gato de la vecina, esquivas al vecino, evades al mozo de la hija de los vecinos, abres la puerta, sigues corriendo, llegas a la esquina lanzas la funda y regresas, subes las escaleras a grandes saltos, vuelves a esquivar a los antes mencionados pero esta vez ya vas cansado y pisas al gato, no te detienes, llegas a casa, entras…y mamá no está, y no sabes donde se ha ido, revisas los cuartos y la encuentras delante del televisor: “eh! Mamá que ya volvi, cuanto tiempo hice”…tu madre mira de soslayo su reloj analógico sin cronometro y te dice 36…pero como eso puede ser posible, 36 que?... y crece en ti un resentimiento temporal (por el asunto del tiempo, claro) y empiezas a tomarle el tiempo a tu madre mientras se alista y al salir le dices: “57 minutos 25 segundos y aún te faltan los zapatos”…y ocurre la magia, entiendes que para las mujeres el tiempo no fluye de la misma manera que para los hombres, entiendes por qué tus amigas de la escuela no tienen un reloj casio digital con cronometro…y te jodes.

Y te jodes más porque sin que tú lo sepas cada mujer se convierte en un triángulo de las bermudas personal y hay 3 momentos claves, cruciales, vitales en los cuales el tiempo fluye de manera alterada….exclusivamente para una mujer
El fenómeno del otro día:
Estás conversando con tu novia cuando de repente te dice:

- El otro día Pablito preguntó por ti
- En serio, cuando?
- No sé…el otro día
- Pero mujer, ¿Qué día?
- El otro día Carlos (nombre desprotegido) por el amor de Dios que manía tienes con los días
- Es que cielo, a excepción de hoy, todos los demás son otros días, si en la escuela me preguntan ¿Cuándo se descubrió América? Bien puedo decir: “el otro día”
- Pero qué importa que día, ya cumplí con decirte que preguntó, la próxima no te digo nada, que intenso que te portas, ni que yo sea calendario.

El fenómeno del ratito
El hombre (entiendas el ser humano) diseñó la forma de medir el tiempo y estableció a grandes rasgos el año formado por 12 meses, los cuales están formados por 30 días (unos más, unos menos), los días en 24 horas, las horas en 60 minutos, los minutos en 60 segundos, los segundos en 1000 milisegundos. Pero la mujer, practica por antonomasia, fue mucho más lejos y creó “el ratito”…cuantos segundos, minutos u horas tiene “un ratito”?

- Cielo ya vamos que llegaremos tarde
- Ya voy amor, solo dame un ratito
- (20 minutos después) cariño ya ha pasado bastante tiempo, se nos hace tarde
- Caramba, que me des un ratito
- Pero ya es casi media hora, llegaremos tarde
- Ya ya…es solo un ratito, ya solo me faltan los zapatos (y la cartera, maquillaje, peinado, aretes, collar…)
El fenómeno cinco minutos
Muchas veces estamos en la mejor parte de una película, o una parte emocionante de un partido de futbol (para quienes les gusta el futbol), o estamos enfrentándonos al villano de turno en nuestro videojuego favorito…y sucede: llega la novia, y llega con prisas:

- Sigues ahí sentado y eso que te mandé un mensaje diciendo que ya venía
- Sí amor pero es que está chévere este juego y este enemigo es difícil
- Pero quedamos en que apenes llegue saldríamos
- Sí amor, déjame grabar y salimos
- Ok pero tienes 5 minutos –TRADUCCIÓN: en tres minutos me voy contigo o sin ti, en el hipotético caso que me tenga que ir sin ti: LO LAMENTARÁS!…

Así que muchacho, cuando escuches que tu novia te da 5 minutos bien puedes ir desempolvando el viejo reloj casio con cronometro que te dio tu madre, o usar el cronometro del teléfono y así tu novia no te agarrará descuidado.

jueves, 27 de enero de 2011

humanidad VS inhumanidad

El ser humano, por definición, es humanitario…o ¿debo decir que se supone que debería ser humanitario?
Hasta que punto podemos despersonalizarnos del medio que nos rodea y asumir una postura distante, insensible, esquiva, mezquina… ¿inhumana?

Acaso necesitamos usar una camiseta con determinado emblema para llenarnos la boca y decir “soy humanitario” para acto seguido quitarnos el emblema y regresar a la inmundicia social del enajenamiento para con nuestros congéneres y buscar, desesperados, intranquilos, una excusa o un esbozo de falsa disculpa que nos permita alcanzar el sueño en las noches…

Cierta persona me dijo una vez que “las personas sin valores no pueden conciliar el sueño en las noches”…y ahora, 15 años después, me doy cuenta que aquella persona estaba equivocada, claro que pueden, claro que lo hacen, claro que duermen, plácidamente, a pierna suelta…porque quienes no tienen valores no sufren el auto ataque mental que sufrimos otros, la incertidumbre de saber si hicimos bien o si hicimos mal, el análisis de determinada acción y el veredicto eficaz, certero, puntual y autoritario de nuestra mente al decir que nos equivocamos, que la cagamos…ellos no sufren la angustia materializada como un vacio en el diafragma, esa angustia que nos advierte que aquella equivocación no será fácil (o posible) enmendar…

Lastimosamente, cada día, esos otros son más…en ocasiones me siento rodeado de ellos, mirando detrás de sus lentes cuadrados, esbozando una sonrisa que no llega a la amabilidad, o aparentando ser tan amables que provoca golpearlos, en ocasiones, siento que vivo en una sociedad zombi en la que lo único que prima es el comportamiento autómata de sus integrantes.

Los humanos cada vez somos más inhumanos…y los pocos que quedamos humanos estamos perdiendo nuestra humanidad…

Lejos están las guerras o los desastres o aquellos incidentes que sacan lo mejor o lo peor de nuestra especie, los vemos a diario en noticieros, lo leemos en periódicos y lo escuchamos en la radio, pero esas guerras, esos desastres y esos conflictos no son nuestros, nos son ajenos, no los saboreamos, no nos importa…porque en el fondo sabemos que al finalizar el día llegaremos a nuestras casas y todo eso no será más que “cosas de la vida” y señales de que “el mundo va mal”…

He aprendido que ser humanitario es más que repetir un concepto como loro y sacar pecho para que le pongan la estrellita o doblar las orejas para la caricia del amo, ser humanitario es ser capaz de levantarse y pronunciarse a favor de sus congéneres, ser humanitario es poder sentir en nuestra propia piel lo que le sucede a alguien de quien no conocemos ni su nombre…ser humanitario es mucho más que ponerse un emblema un fin de semana para tener excusa y salir con los panas.

Es una pena que organizaciones que van por la provincia esgrimiendo su eslogan humanitario no sean, precisamente, humanitarios con sus colaboradores…da miseria en lo más profundo del espíritu humano ver que cierto grupo de personas se llene la boca de frases humanitarias y los bolsillos de humanitarios dólares, adquiriendo humanitarios vehículos innecesarios, mientras los que están abajo en la pirámide deben cubrir salud, medicinas y demás gastos de accidentes con lo que apenas hay en su ya maltratado bolsillo.

Quiero pensar, me alegra pensar, prefiero pensar, que es algo local, que la podredumbre, la codicia, las ansias de poder, la inhumanidad y la falta de valores no ha alcanzado a todo mi país, quiero pensar y me aventuro a pensar que los otros componentes están intactos en su espíritu humanitario, me comprometo a pensar que hay personas fieles a sus principios y leales a una sola idea, porque mientras más lo pienso más hay esperanzas, mientras más lo medito, más aparecen oportunidades de levantar aquello que tanto queremos a su gloria original, porque contra todo pronóstico los humanitarios seremos más, fieles a una idea y no a una chequera.

miércoles, 19 de enero de 2011

infiernillo femenino 1

Para muchos solo hay una manera de caerle bien a una mujer, una única forma, simple, sencilla, tan simple y tan sencilla que muchos la utilizan aun sin saberlo…¿quieren saber cuál es?. Pues halagarla, siempre funciona, y una mujer sin importar su condición social, sus estudios, sus creencias ni su orientación sexual, siempre está abierta para un halago. Claro que hablamos de halagos normales, sencillos, como por ejemplo:

“bonito cabello”, “bonita blusa”, “eres muy buena con los números”…etc.

Pero…que pasa cuando se ha logrado cierta confianza, cierta confidencia y creemos que podemos ser más sinceros, más abiertos y espontáneos…¿es correcto serlo?. NO! Tajante, rotunda y absolutamente NO. La sinceridad es algo que las mujeres esgrimen a cada instante pero que por alguna extraña razón no soportan cuando se les aplica.

Una mujer puede llegar a odiarte si cometes el error de ser sincero y decir las cosas como las piensas sin siquiera darle un elogio o un halago aunque sea camuflado.
¿Que es un halago?...simplemente dar a notar alguna cualidad positiva en la chica y mencionar esa cualidad demostrando cierto grado de admiración, ¿muy sencillo verdad?, pues aquí se complica porque a veces no tenemos nada que halagar…y que toca hacer…pues mentir, pero vamos que son mentiras de un calibre pequeño y hasta podría decirse que son por una buena causa.

Lastimosamente, las mujeres son seres a los que les gusta clasificar, de esta manera ellas tienen clasificados a aquellos chicos a los que intimidan, los que les babean y no dicen nada, los que las elogian y las halagan hasta el cansancio y los idiotas.

Hace unas semanas una chica moderadamente simpática me etiqueta en una foto y asumo que es para que deje algún tipo de comentario, a las 2 horas de haber sido etiquetado, los comentarios de la foto de la mencionada chica parecía la sección de lácteos del megamaxi…¿Qué hacer?, ¿ser parte del montón o decir lo que en verdad uno piensa?...siendo como soy, dije lo que pensaba, que dicho sea de paso tiene una base científica que puede ser probada en cualquier momento, el resultado, una clasificación de que soy idiota.

Así que mis queridos lectores, de ustedes depende, ser parte del montón o ser considerados idiotas…ahora que ser idiota tiene sus beneficios: hay más libertad para decir lo que se piensa todo el tiempo, se puede hacer bastante uso del humor, nuestra idiotez nos da una ligera luz interesante, nos pone por encima de los acartonamientos hipocrito-sociales…y, aunque muchas lo nieguen, un hombre que de una u otra forma de separa del montón de quesos con sus halagos fofos, llama la atención…y al final es solo eso lo que se necesita:… una fracción.