miércoles, 27 de mayo de 2009

FELIZ CUMPLEAÑOS A MI

Ya me llegaron los 25. No se cuanto me queda de garantía, ni sé si hay repuestos para mi modelo. La pintura ya se ve mal en algunas partes a esta edad empezamos a preocuparnos por el insistente deseo de crecer de la panza y toca combatirla, voy al gym, hago espinning, de vez en cuando salgo a trotar (un valioso consejo de Sol) con esta rutina pronto voy a estar como los de 300: Muerto.
La universidad está por acabarse, llevo un diplomado por la mitad, veo al colegio como la mejor época de mi vida soslayando en parte lo que está por venir, la escuela es solo un recuerdo azul que se hace traslucido y se alterna con otros muchos muchisisimos recuerdos que llevo en la mente y en mi corazón (dónde quiera que este se encuentre). Me levanto estresado porque tengo que volar a cruz a DAR clases, los amigos piden permiso para salir, tengo varios amigos que han caído en combate debido a las garras crueles del matrimonio. Me pongo mentol chino antes de hacer deporte y el doble de la dosis al terminar. Si como en la calle a veces me enfermo. A ratos no entiendo la música. Me estoy haciendo viejo.Si, viejo. Viejo pero contento. Mi vida parece que tiene sentido, he llegado a ustedes con mis textos, les he hecho reír o insultarme, de cualquier forma les he liberado un poquito el stress, estoy camino a convertir uno de mis mas grandes sueños en realidad, me esfuerzo en dar lo mejor de mi cada día (hay días que creo que no lo logro), hay alguien muy especial en mi vida (a la que le falta un tornillo y le sobra buen rabo), la adoro, es mi amiga, mi consejera, mi psicóloga particular, me escucha, me lee y lo mejor de todo: ¡ME ENTIENDE!!!!... en fin parece que todo va bien.

Desde este espacio me gustaría agradecer a Dios donde quiera que esté o quien quiera que sea (mejor que tenga un poquito olvidado al mundo…así no me falta trabajo) a mi madre por el aguante, la paciencia, el apoyo, las retadas, los castigos, los consejos, los avisos, las amenazas, los caprichos, en fin he sido y soy feliz porque gracias a ella (y solo a ella) he tenido todo cuanto he necesitado y una parte de lo que simplemente he querido, gracias por nunca dejar que me falte nada y por traerme a este planeta en el momento justo para poder hacer la diferencia…o al menos intentarlo.

Gracias a mis maestros (aunque sé que no leerán esto…la mayoría no sabe como encender una computadora, o que es una computadora) a las personas mayores que encontré en mi vida y me enseñaron desde comer con todos los cubiertos tenedores y cucharas que existen, pasando por saber apreciar un buen libro hasta disfrutar de un buen vino, aquellos que me aconsejaron, aquellos optimistas que intentaron enseñarme matemáticas quiero decirles que no fueron ustedes…fui yo, pero gracias mil por el intento, a mis profesores de literatura, a los de química, al hijo de puta de anatomía, en fin a todos y cada uno de ellos que aparte de por su sueldo me enseñaron porque creyeron en mi…(al menos eso quiero pensar)

Gracias a mis amigos, a los de ayer, a los de hoy y a los de siempre, a los grandes ausentes con quienes viví momentos muy felices dentro del colegio, de farra, en relajos, las grandes golpizas memorables, a Miguel donde quiera que estés gracias por el apoyo y gracias por el Nick, a mis amigos del colegio que solo recuerdo los apodos, gracias a mis amigos de Cruz Roja que digo mal al decir mis amigos, porque ellos y ellas son mi familia, la familia que uno se va armando en el camino, el equipo con el que me encanta trabajar y aunque a veces nos queramos matar sabemos que eso pasa y nuestro aprecio, afecto y/o cariño surge por sobre todas las dificultades, gracias a las personas que entraron a Cruz, a los que se fueron, a la gran ausente Marjorie Garaicoa gracias por hacerme conocer el movimiento y enseñarme a cogerle cariño y aprecio, gracias a Ale, Cabeza de brócoli, Diario, Pollito, Spike, 28, Alexis, Sol, Pinocho, Andreita, Gloria, Evy, El Sir, Gusanito, Geova, Sofea, Guadys, El Holger, Mafer, El Marcelo Erazo, Viktor, El Guillo, El jefe, Al Guambra David, Super Pepe, Dra Hilda, La Chirley, Kathia, Ing Carrera (XD), Sr. Chiriboga (jajaja hdp)…en fin a Cruz Roja en general ya que sin la ayuda y sin la formación del movimiento ese niño que se congelaba delante de la gente y cuando hablaba cantinfleaba no se hubiera podido convertir en lo que soy ahora…orgullosamente Cruz Rojista. A mis amigos de la U gente valiosa que me han apoyado y con quienes las horas aburridas se van volando, Gabo, Teresa, Chino, Jeni, yunga, el rocker, Angulo, Ana.

Gracias a aquellos Angeles y Demonios que me enseñaron que no solo es real lo tangible y que hay un universo intangible escondido a simple vista y solo debemos aprender a observar, a Diego por el apoyo a Marcela por la oportunidad de encontrarme, a Shingo por la realidad de las cosas y por enseñarme la naturaleza de los anormales, a Carolina, Corina, Valeska, todos los normales y anormales que he conocido a los muchos demonios amigos y enemigos al par de angeles locos y desorientados, estoy entrenando y pronto les agradeceré como se merecen. Quod non me necat, fortiorem me reddit.

Gracias a Sir Thomas, El Boroto (gracias por el copyright) y al Inconformista por enseñarme el mundo de los bloggers ya que aquí también conocí gente súper chévere como los compañeros de putavidaec, elboroto, ecuafriki, entre otros, que aun cuando no conozco en persona sus escritos o nuestras discusiones me permiten saber la clase de pensadores o la clase de hijos de puta que son jajaja (putavida)

Gracias a las personas que leen mi blog, a los que comentan, a los que leen lo que publico en putavida y a los que me putean…son sus comentarios los que me hacen mejor como escritor frustrado y son las puteadas lo que me hace mandarlos a la casa más grande…en fin gracias por leerme.

La típica: si pudiese volver el tiempo atrás cometería los mismo errores, pero evitaría ciertas peleas, no vería ciertas películas (como el asco de dragon ball, la cagaste akira) y viajaría más de lo que he viajado…el resto lo dejaría igual, gracias a eso soy quien soy y me gusta ser quien soy.

Cumplir un cuarto de siglo me ha puesto medio nostálgico y melancólico…quienes me conocen saben que no soy así…pero una vez cada 5 lustros no está mal.Ahora me voy a acostar. Me sacare los dientes y pondré en el vasito.

Hasta mañana, hoy dejo de tener 24.

domingo, 17 de mayo de 2009

Tener razón

Quiero contarles lo que más placer da en el mundo y no es el sexo, ni la comida, ni el dinero, ni que te rasquen la espalda justo donde te pica... Lo que más placer da en el mundo es tener razón. ¿A que sí? ¡Ja! ¡Qué gusto da que te den la razón! Por cierto: ¿se han fijado en que siempre que tenemos razón decimos: «¡Ja!»? Éste es el sonido universal de tener razón: «¡Ja!».

Por ejemplo: vas en el carro con tu mujer a casa de su madre. Y tú le dices:
—Cariño, para en esta gasolinera que vamos con poca gasolina.
—No, que llegamos de sobra, y además a mi madre se le pasa el seco.
-—Cariño, no te pongas tonta que no llevas gasoliiiiiiiina...
—¡Desde luego tú... con tal de joder a mi madre...! ¡Te he dicho que llegamos de sobra!
¿Que llegamos? A los diez minutos te ves caminando por la calle, muerto de frío, con una lata vacía en la mano, pero más contento que piojo en cabeza de hemofilico: «¡Ja! ¡Anda que el seco se habrá quedado bueno! Que llegamos de sobra, que llegamos de sobra... ¡Toma sobra!».
Y es que hasta las desgracias te duelen menos si tienes razón.

Estoy seguro de que en el Titanic hubo alguien que dijo:
—Este barco se puede hundir...
—¡Mira loco, este barco es un transatlántico insumergible, para que te enteres!
—¡Pues yo te digo que se puede hundir... como se nos cruce un iceberg o cualquier cosa de ésas... nos hundimos seguro!
Y, claro, cuando naufragó, el tipo dijo:
—¡Ja! ¡¿Ves como yo tenía razón?!
Y fue nadando de bote salvavidas en bote salvavidas, diciendo:
—¡Yo tenía razón, glu, glu, glu...! ¡hazte a un lado que yo tenía razón, glu, glu, glu!
—Pues ahógate con tu razón, ¡pendejo!

Tener razón es más importante que cualquier otra cosa. ¡Más importante que el sexo! Estás con tu chica a punto de hacer el amor y entonces ella dice:
—Cariño, has dejado la cisterna corriendo.
—Yo no he sido, la última has sido tú.
—¿Yo? Pero si eres tú el que te dejas siempre todo a medias...
En este momento tienes que elegir entre tener sexo o tener razón. Y eliges:
—¡Pues que conste que has sido tú, porque yo llevo el condón puesto desde hace una hora! ¡Ja!
Y ése es el único gemido que vas a soltar esa noche. Pero te da igual, ese «¡Ja!» es como un orgasmo, te dan ganas hasta de encenderte el cigarrito.

La razón también es más importante que el dinero, a veces dices alguna pendejada sin pensar:
—Pues Alejo y Valentina son cuatro.
—¡Pero qué dices, hombre, son dos!
Tú sabes que la has cagado, pero ya no te bajas del burro:
—Pues te apuesto 10 dólares a que son cuatro.
¡Chuta 10 dólares! Sabes que los vas a perder, pero da igual, nunca admitirás que son dos:
—¡Que Alejo y Valentina son cuatro...! Lo que pasa es que no incluyen a carlitox ni al viejo ahí está: cuatro.
Y te emperras tanto que te acaban dando la razón por agotamiento:
—¡Que son cuatro!
—¡yaaa simon, son cuatro, lo que quieras!
Pero aquí pasa una cosa rara. Si te dan la razón por agotamiento no da el mismo gusto:
—Oye, a mí no me des la razón como a los locos, ¿eh? ¡Son cuatro y son cuatro! Como los tres mosqueteros, ¡que también eran cuatro!

Tener razón es incluso más importante que la salud: te dice el médico:
—Tiene usted que dejar de fumar.
—¿Y por qué voy a dejar de fumar si eso a mí no me afecta? ¿No me puede quitar otra cosa?
—Como siga así lo que le voy a tener que quitar es un pulmón.
—Pues vale, quítemelo, mientras no me quite el tabaco...
Y cuando sales:
—¡Que el tabaco me perjudica, ¡Ja!... Este tipo no tiene ni puta idea! Mi abuelo ha fumado toda la vida y ahí lo tienes... Muerto. ¡Pero porque lo fusilaron en el cuarenta y dos, ¿eh?!

Y es que no tener razón da mucha rabia, por eso sólo damos la razón cuando no nos queda más remedio. Al jefe (si asi con minusculas), por ejemplo. ¿Se han dado cuenta de la cantidad de pendejadas que tenemos que admitir sólo porque las dice el jefe?:
—Ricardo, tenemos que mandar un e-mail a la Patagonia, así que compre sellos.
—Pero es que el e-mail va por ordenador...
—Sí, sí, pero usted póngale sellos, que es mejor asegurarse.
—Pues tiene usted razón, ahora mismo me pongo a pegarle sellos a la pantalla.

Y ésa es la verdadera razón por la que todo el mundo quiere ser jefe: ¡para que le den la razón!
Pues eso, que no hay ningún placer que se pueda comparar a tener razón. Y si lo piensan, tampoco hay nada más inútil, porque tú tendrás mucha razón pero tienes que ir caminando por la gasolina, no te acuestas con tu chica, te quitan un pulmón... y hasta te ahogas en el Titanic. Por eso yo digo que tener razón es como tener un avión de mármol, no sirve para nada. ¿A que sí?
¡Ah, qué gusto da que te den la razón!

domingo, 10 de mayo de 2009

DE LAS MADRES

Todas las madres del mundo hacen y dicen exactamente las mismas cosas. Yo creo que les dan un cursillo secreto en el que aprenden esos comportamientos que llamamos "cosas de madre". Quién no ha escuchado alguna vez el clásico "Tú hazle caso a tu madre, que tu madre sabe mucho de esto..." ¿De dónde creen que ha podido sacar una madre una frase así? Pues del cursillo.
Lo primero que les enseñan en el curso es a repetir mucho las cosas. Por eso, cuando eres bebé hablan contigo como un disco rayado:
- ¿Cómo estás? ¿cómo estás? ¿cómo estás?
Seguro que si el bebé pudiera hablar, les diría:
- Hasta los huevos, hasta los huevos, hasta los huevos...
En el cursillo también les dan clase de lenguaje, y aprenden a incluir en todas sus frases el "mi" y el "me". Un ejemplo: "mi niño no me come", "mi niño no me duerme". Son tan posesivas que en la agenda, ponen todos los teléfonos de sus hijos en la letra M: "mi Paco" ,"mi Alberto", "mi José". (y las que hacen esto siendo novias son unas manipuladoras y quienes lo permiten son unos pendejos…bueno bueno manipuladoras sus pendejos)
Gracias a estos cursillos, las madres son capaces de hablar de dos temas a la vez:
- Mamá, quiero hablar contigo.
- ¿Qué te pasa, hijo mío? ¡No arrastres los pies!
- Es que estoy pensando en dejar de estudiar...
- ¡No te toques los granos! ¿Pero cómo vas a dejar los estudios?
- Es que no me gustan
- Uy, hay tantas cosas que no me gustan a mí...¡Ponte derecho, que te va salir joroba!
Y llega un punto en que, sin saber porque, ambos mezclan las conversaciones y acaban por zanjar ellas la cuestión:
- Pero ¿cómo vas a tener ganas de estudiar si no arreglas tu cuarto? Anda arregla que no hay quien entre...¡Y estudia!

En estos cursillos de madre les inculcan, sobre todo, tres principios:
Que tome calcio, que respete las horas de las comidas y que en invierno te abrigues. Aunque tengas noventa años y tu madre ciento veinte, al salir camino al geriátrico te gritará:
"Julián, abrigaraste bieeeeen!!".
Por supuesto, el cursillo también incluye clases de estilo y moda.
Una madre siempre sabe lo que es moderno y se empeña en llevarte de compras y vestirte a la última.
- Uy, esta camisa es preciosa, hijo
- No.
- Pero ¿cómo que no? Si es lo que se lleva ahora.
- Lo que se lleva ¿dónde?¿en el circo de los hermanos fuentes gasca?
Además, todas las madres son videntes.
- Niño, que te vas a caer.
Y te caes.
- Niño, no comas tan deprisa que te vas a atragantar
Y te atragantas.
- Hijo, ten cuidado que ésa es una puta manipuladora.
¡Y es una puta manipuladora!

Hay que reconocer que en estos cursillos son bastante profesionales. Y es que incluyen hasta nociones de policía. Las madres se transforman en auténticos sabueso: "tú has fumado". O "tú has bebido". O "esos calcetines llevan tres días sin cambiarse".

Creo que en los aeropuertos, los agentes, en vez de con perros, deberían ir con su madre. Lo que no les enseñan en el curso a las madres, es que sus hijos crecen.
Ya vives solo, vas a verla pasando un día...pero eso no les impide seguir cebándote: te pone en la mesa la comida para dos semanas, y se sienta al lado y empieza:
- ¿qué pasa, no está bueno? Anda, termínate las albóndigas, el bacalao, los pimientos rellenos y la crema de brócoli...y come pan. ¿Te pelo una naranja?

Porque una madre nunca está satisfecha. Por mucho que hagas, ella nunca estará contenta. ¿Quiere que te cases?
- Ok, pues me caso. ¿Estás contenta?
- No, que ésa es una puta manipuladora. (si si la misma)
- Ok, pues me divorcio.
- Pues no, ¿qué va a ser de tus hijos?
- Mamá me he ganado la lotería, ¿estás contenta?
- No, ahora vas a ver cómo te roban los del SRI
- Mamá, me han nombrado ministro de salud.
- Bueno, pero abrígate, que coges frío.
Pero aunque todas las madres hacen siempre las mismas cosas, ninguna hace lasaña como tu madre, ninguna te recibe con tanta alegría como tu madre, y ninguna te abriga como tu madre cuando hace frío.

sábado, 2 de mayo de 2009

LOS GUIONISTAS

¿Se han fijado ustedes en lo poco originales que son los guionistas?
Me refiero en general, y en particular a los de cine.
¿Por qué siempre en todas las películas, cuando hay una persecución con carros, pasan por un mercadillo con fruta? Da igual que sea el centro de New York, India, Kurdujistan, El Guasmo, ahí está la caja de tomates para que la tiren por toda la calle.

Y en las de chinos, por ejemplo, siempre hay un tipo muy malo malísimo, un fumanchú, que ha destrozado el honor de la familia, y cuarenta años más tarde, va su hijo para buscar venganza por ahí. Por toda China, a sacarle la puta a todo el mundo.

Precisamente vengo del cine ahora. Vengo de ver una de esas películas en las que el director va de original, ¿sabes? Yo no sé por qué se han empeñado ahora en hacer películas diferentes. Es que hemos acabado viendo películas en las que el bueno ya no es tan bueno, y sin embargo el malo, chuta pues poco a poco lo vas entendiendo, sí, sí que te vas poniendo en sus zapatos que lo ves y dices: “chucha si es que me cae de puta madre" Y van y se lo cargan, y ya no disfrutas.

Desde luego, es que hay cosas en las películas que no pueden faltar, por ejemplo en las películas del Oeste. (Gracias a Dios ya no hay muchas)

En una buena película del Oeste, no pueden faltar los tiros y los puñetazos.
Bueno, a los vaqueros los puñetazos no les duelen, lo que les duelen son los algodones, en serio, que es que tú ves que les están pegando unas palizas impresionantes, los manes, hechos los duros aguantan y no dicen nada. Ahora, cuando llega la chica con el algodón, le va a curar... ¡Ay,ay,ay,...! ¡Ay,ay,ay,...!
No sé, en las películas del Oeste no faltan los indios. Los indios siempre distantes, serios, sentenciando. Eso sí, muy infelices porque claro cuidado ¡que yo los entiendo, a ver cómo estarían ustedes si estuviesen toda la vida viviendo de camping y encima en esos caballos que no tienen una silla decente.

Las películas de romanos tienen su parte semi histórica interesante: Ben Hur, Charlton Heston,... eso es algo que a muchos les gusta. Por ejemplo, las de romanos se dividen en dos: las de romanos romanos, y las de romanos con Jesús. Que sí, es que, este último además sale siempre de espaldas, y claro como es rubio, no sabes si es Jesús o algún hippie romano.
Luego están las de romanos romanos, éstas son más agresivas, más sangrientas y es que los romanos lo inventaron prácticamente todo. Por ejemplo... el buffet libre. ¡Pedazo de buffets que se hacían los manes! Que los ancianos vamos, envidia pueden tener los jubilados. ¡Unas bandejas de fruta, unos pollos, unos cerdos,...!
Aunque a mí lo que más me llamaba la atención, es que no hubiera calamares, cuando precisamente si hay algo que ha trascendido son los calamares a la romana.
Y no había allí, pero bueno...
Tenían moneda única, que era el sextercio. Y siempre llevaban en la bolsita esa, siempre llevaban todo el dinero, ¿no? Y llegaba uno y le decía: "¿Me das 600 sextercios?"
Y le daban la bolsa. Llegaba otro y le dice: "¿Me das 300 sextercios?"
Y le daban la bolsa.
"Dame un sextercio y medio" ¡Y le daban la bolsa también! es que llevaban el dinero en la bolsa justo. Los manes no perdían el tiempo con sueltos ni contando, todo lo sabían de antemano.

Otras películas que están muy bien son las de chinos... bueno, el argumento es lo de menos, lo que importa es que vayan a lo que tienen que ir, como las porno (¡Esas son...! ¡Son geniales!). Además es que el argumento siempre es el mismo, no? Un viejo que tiene un restaurante (o algo por el estilo), la mafia se lo quiere quitar, entonces el viejo va a pedirle ayuda a un chico, el chico dice: "Mira no, yo nunca me he peleado", hasta que le revientan la nariz al chico este, se calienta...y en un parpadeo es doble cinturón negro en más de 7 formas diferentes de artes marciales y te quedas loco, si dices: "mas canguil, más coca-cola" ¡Eso es negocio!
En las películas de chinos, que la china no muera. Porque los chinos además, tienen muy mal sentido del humor para estas cosas. Porque a un chino le puedes hacer de todo, pero ahora, que la china muera...ya te puedes esconder, como su china muera: te jodiste.

Hablando de esconderse, lo mal que se esconden los malos en las series policíacas. Porque están ahí, detrás de una columna, están así. Y claro, se les ve toda la barriga fuera, y el bueno es bueno porque es bueno, pero no es pendejo, claro, se cabrea y los mata a todos, todo lo que les debe pasar es que se calientan... y se calientan y van por ahí regalando bala a todo el mundo, y nunca se les acaban las balas…

Las mejores son las películas de miedo.
¿Qué les pasa a los carros de las películas de miedo? ¡Que no han pasado la revisión vehicular, no han comprado el SOAT, está el pendejo ahí arrancando el carro, y el malo que lo alcanza, el malo que lo alcanza...el pendejo que no arranca el carro, y el malo no deja de seguirlo y hasta que no tiene la nariz pegada a la ventanilla, el carro no arranca, miren eso que va a pasar alguna desgracia un día y definitivamente ese carro no va a arrancar…

En las películas de miedo no puede faltar el idiota, ese que le han dicho "no te separes". Y se separa. Dice: "No, es que voy por velas al sótano" y lo matan ¡con razón! ¡Es que casi te alegras! Dices: "!Toma por idiota!"
Una cosa que es muy peligrosa en las películas de miedo, es la higiene, porque ves a alguien en la ducha, y dices: "este cae fijo", o le tiran un secador enchufado, o baja un tipo y le ahoga o lo que sea...pero muere fijo. Igual que si sale un borracho sin venir a cuento, dices: “Esta cae seguro también" O un gordo, o un negro... Aunque estos últimos, los negros, lo pasaron muy mal en las películas de Tarzán. Porque era una época en la que el cine era muy racista, y en las películas de Tarzán, los puteaban...porque no hacían nada más que caerse por las montañas. Que no lo entiendo, porque los blancos no tienen ni puta idea de por dónde van, y sin embargo no se caen, pero los negros, que conocen la selva de cabo a rabo, se están cayendo cada dos por tres. Y con el fardo y todo, que no lo sueltan: "Ahhhhhhh...y pum al fondo"

Aunque las películas de Tarzán, no son malas todas, algunas nos dieron que aprender.
En las películas de Tarzán, aprendimos una palabra que es que lo decía todo: "ANGAUA"
Decía: "Corre, corre. Angaua, angaua" "Fuera, fuera. Angaua, angaua" "Silencio. Angaua"

- Oye, ¿me traes una cerveza de la refri?
- Angaua. Voy.
- ¿Me la traes o no?
- Que "angaua" voy chukcha

Es increíble que se empeñan en poner cosas, en hacerlas diferentes, y es que no, incluso en el sexo. El sexo se hacía en la cama, se hace casi siempre en la cama, pues no, ahora en cualquier sitio, y se conocen y nada más que se conocen al pum pum pum.
Y les da igual en un cubo de basura, en una reja, en las escaleras,... que se hacen daño contra los escalones. Que lo hagan en el descanso o en los pasamanos que es medio cómodo.
Y cuando no, que llegan a casa y empiezan a tontear: "Uf, ¡qué calor!" Y la coge y la echa contra la pared (pum), "espérate", y la coge contra la otra pared (pum), y la coge para el otro lado, y la pared es lisa, ok, pero, ¿si es de cemento, o qué?
Yo creo que lo que tienen que hacer, es dejarse de extravagancias, poner las escenas que a nosotros nos gustan, porque así iremos al cine. (y…si no es mucho pedir que le bajen el precio al canguil y la cola)