lunes, 27 de julio de 2009
Me han regalado un perro
Hace ya unas semanas, unos amigos me preguntaron: “Oye, ¿qué quieres para tu cumpleaños?” (Súper atrasado por supuesto) -“Dame una sorpresa”, “No, no, dinos qué quieres, porque así es más fácil...” -“Que no, hombre, dame una sorpresa...”
“No, anda, dinos...”
Digo “bueno, un perro...” pero como el que dice una laptop, una tele, una videocámara... no, un perro ¡je!
A la semana siguiente recibo su visita en mi casa, veo una caja de cartón que se mueve... digo “no será un perro”. mierda, la abrí y era un perro... ¡un perro! Un cachorrito así, de un mes, haciéndome chantaje emocional. Miraba así... “el nunca lo haría” digo “bueno, pues yo tampoco, me lo quedo...”
Total, que un perro, ¿y ahora qué hago yo con un perro? Pues corrí a la librería, claro, como suelo hacer, y me compré un libro titulado “Cómo adiestrar a su perro”. Digo “mira, este parece que va con el tema”
Capítulo 1 – “Cómo hacer que el perro no orine en casa” Está bien, porque coincidía con lo primero que quería saber mi madre, también. Sí, así es que bueno, para esto hay varios métodos, y el más efectivo es el más cruel, consiste en coger un periódico, enrollarlo, untarlo por la orina y darle al perro, a mí de pequeño, pues no me hubiera hecho gracia que mi madre, en lugar de llevarme al orinal o cambiarme los pañales, me hubiera dado un bofetón con la mano llena de pis, pero bueno, pues como no me quedaba otra alternativa, mi madre realmente tenía prisa, digo bueno, pues le doy con un periódico, correcto. ¿Con qué periódico? ¿Le meto con el súper, es decir, flojito? O le doy un periodicazo con el universo...
Pues oye, al final ni el súper ni el universo, le di con la extra, que no hacía falta untarlo en el pis para que oliera mal...
Bueno. Capítulo 2. El perro tiene que aprender cuatro órdenes básicas en la vida de todo perro, que son “ven aquí”, “siéntate”, “dame la pata” y “échate”... en inglés. ¿Por qué? Porque así sólo te hace caso a ti y no entiende a nadie más, digo “muy bien... muy bien pensado, porque hoy en día prácticamente nadie sabe inglés...”
Entonces ven aquí es “can”, que es perro en inglés... Luego está siéntate, “sit”, la pata, “the... the pat”, y túmbate que es “flor”, que no sé qué carajo tiene que ver pero es así, entonces, la primera pues es fácil, dejas al perro aquí, te pones tú como a cuatro metros, “¡eh!... can”. ¡Ajaja! (risita). Claro, el perrito es pequeño y ya encima le vienes con idiomas...
Bueno, pues a la decimocuarta vez que le dije can, lo cogí por la pechera, lo arrastré por el piso, vino sin ningún problema... Lo jodido fue luego que se sentara, que me diera la pata y que se echara sin darle una galleta después, porque el librito decía “no se le ocurra a usted darle galletas, no, el perro tiene que hacerlo porque sí, porque es su naturaleza de perro” Si, hombre, y tú te crees que los perros son pendejos.
El caso es que con paciencia el perrito fue asimilando estos conceptos, incluso alguno más difícil que no venía en el libro, como “no te subas al sofá si mi madre está delante” y otro que le tocó aprender con la experiencia que es “si tu dueño llega a casa a las seis de la mañana cansado, tú no meas hasta las cinco de la tarde”.
Es decir, que tengo un perro, lo quiero mucho, porque el roce hace el cariño, pero vamos, no le saco ninguna utilidad.
Bueno no, cuidado, una sí. Al cabo de un tiempo nos hemos dado cuenta de que un perro sirve básicamente para utilizar la cámara del celular. Oye, estás aburrido y no hay nada bueno en la tele... “ok” “tómale una foto al perro”...
Así que tengo un perro, y quizás se pregunten a estas alturas, “Chucha, ¿y por qué te lo quedaste?”
Pues es que no lo sé, ahora, eso sí, tengo una cosa muy clara, si un día yo me hago famoso por atracar bancos, masacrar huérfanos y violar monjas, el perro me seguiría recibiendo igual de contento cada vez que llego a casa.
martes, 21 de julio de 2009
Esos seres extraños que nos vuelven locos...literalmente
1.- OK!!!!. Esta es la palabra que las mujeres utilizan para finalizar una discusión, cuando han decidido que ellas tienen la razón y ahora debes callarte.
2.- CINCO MINUTOS. Si se está arreglando, significa MEDIA HORA. Si tú estás mirando el partido, y ella te dijo “cinco minutos”, entonces significa que te ha concedido sólo cinco minutos.
3.- NADA. Es la calma antes de la tormenta. Significa ALGO. Y deberías estar totalmente alerta esperando casi siempre lo peor. Discusiones que empiezan con “nada”, normalmente acaban con OK (Ver punto 1).
4.- NO HAY PROBLEMA. También puede ser “adelante, hazlo” o “no me molesta. Es un reto, y para nada significa que te está dando permiso. Ni se te ocurra hacerlo!.
5.- GRAN SUSPIRO. En realidad, es una palabra pero habitualmente los hombres no la entienden. Un suspiro alto y claro significa que ella piensa que eres idiota y que no sabe de dónde más sacar paciencia, para no mandarte a la “remierdita”. Además se pregunta por qué está perdiendo el tiempo contigo discutiendo sobre NADA. (Ver punto 3 para entender el significado de NADA).
6.- MUY BIEN!!. Esta es una de las frases más peligrosas que una mujer puede decir a un hombre. MUY BIEN significa que ella meditará maligna y cuidadosamente antes de decidir cómo y cuándo pagaras por tu grave equivocación.
7.- GRACIAS!. Si una mujer te agradece algo. No preguntes. No dudes. Solo di DE NADA.
8.- DA IGUAL. Se puede reemplazar por “como quieras”. Es la forma femenina de mandarte a la “conchita” y que de una u otra forma, más temprano que tarde buscará alguna forma de venganza.
9.- TRANQUILO, NO TE PREOCUPES, DÉJALO ASÍ. Otra frase muy peligrosa, que normalmente se oye cuando la mujer le ha pedido al hombre que haga algo en especial, pero como él no lo hace, finalmente ella termina haciéndolo. Esto más tarde empujará al hombre a preguntar ¿QUE PASA?. Para saber la respuesta de la mujer, ver punto 3.
10.- AAAAHHH!. Cuando la mujer le pregunta algo y el hombre da una explicación tonta o no creíble. Ella solo dice Aaaahhh… pero sabe que la respuesta no la convenció y ten por seguro que seguirá indagando por sus misteriosas vías.
viernes, 10 de julio de 2009
Diferencias entre Hombres y Mujeres.
Un hombre nunca llama a una relación una relación. Siempre se refiere a ella como “la vez que Linda y yo nos lo pasamos tan bien”.
Cuando termina una relación, una mujer llora y abre su corazón a sus amigas. Luego escribe un poema titulado “Todos los hombres son idiotas”. Después seguirá adelante con su vida.
Un hombre tiene más problemas para olvidar, seis meses después de la ruptura, llamará a las 3 de la mañana un domingo y dirá sólo quiero que sepas que arruinaste mi vida y que nunca te lo perdonaré, y además te odio, pero me gustaría que supieras que creo que todavía podemos volver a intentarlo, esto se conoce como la llamada te odio/te quiero del borracho, que el 99% de los hombres han hecho alguna vez. Hay grupos de terapia especializados que ofrecen tratamiento a los hombres para ayudarles a superar ese trauma, lastimosamente rara vez se obtienen resultados positivos.
Pero son tan marcadas estas diferencias que hasta pueden ser clasificadas:
Sexo
Las mujeres prefieren 30-45 minutos de preparación.
El hombre prefiere 30-45 segundos de preparación…además considera el llevar a la chica de vuelta a su casa como parte de esa preparación.
Madurez
Las mujeres maduran mucho más rápido que los hombres. A los 17 años pueden funcionar como adultos.
La mayor parte de los machos humanos de 17 años siguen cambiando cromos de fútbol y peleándose en el gimnasio, esta es la razón por la que los amores escolares no suelen perdurar.
Sombreros
A las mujeres les sientan bien, los hombres parecen mafiosos.
Escribir a mano
Los hombres escriben rápidamente y sin añadir detalles.
Las mujeres usan papel perfumado, de colores y llenan las cartas de chorradas y dibujitos. Es realmente terrible leer una carta de una mujer, aunque te odie pondrá una cara sonriente al final de la nota.
Baños
Un hombre tiene siete objetos en el baño: cepillo de dientes, pasta, crema de afeitar, maquinilla, champú, jabón y una toalla robada de un hotel.
El número medio de objetos que una mujer tiene en el baño es de 437, un hombre es incapaz de identificar la mayor parte de esos objetos.
Revistas
Las revistas de hombres tienen fotografías de mujeres desnudas.
Las revistas de mujeres también, esto es así porque el cuerpo femenino es una obra de arte y el del hombre está lleno de pelos, barrigones y no debería ser enseñado a la luz del día.
Hacer la compra
Una mujer hace una lista de las cosas que necesita, va a la tienda y las compra.
Un hombre espera hasta que en la nevera le queden medio limón y algo verde sin identificar, entonces va al supermercado compra todo lo que le parece bonito de aspecto cuando llega a la caja se da cuenta de que va a dejar tiesa su tarjeta de crédito y jura corregirse la próxima vez, por supuesto que no lo hace.
Salir
Cuando un hombre dice que está listo, significa que está listo.
Cuando una mujer dice que está lista significa que estará lista tan pronto como encuentre el otro arete, termine de maquillarse, se ponga los zapatos y encuentre su cartera...
Zapatos
Cuando va a trabajar, una mujer lo hace con zapatos de deporte y se lleva los zapatos de tacón en una funda de plástico o un bolso cuando llega se los cambia cinco minutos después se queda descalza porque nadie le ve los pies debajo del escritorio y además le hacen daño.
Un hombre usa el mismo par de zapatos todo el día.
Calentadores
Los calentadores son sexy en una mujer, incluso lavando los platos o paseando el perro, puede llevar calentadores los puede usar todo el tiempo que quiera.
Un hombre sólo puede usar calentadores si se presenta como bailarín principal a un musical.
Gatos
A las mujeres les gustan los gatos.
Los hombres dicen que les gustan los gatos, pero cuando las mujeres no miran les dan una patada.
Espejos
Los hombres son coquetos, se miran en un espejo.
Las mujeres son ridículas se miran en cualquier superficie reflectante –espejos, cucharas, escaparates, tostadores, la calva del marido...etc
Garajes
Las mujeres usan los garajes para aparcar sus coches.
Los hombres usan los garajes para muchas cosas cuelgan pósters en las paredes, ven la TV en los garajes y los llenan de herramientas para construir cosas inútiles de madera.
Películas
Para las mujeres su escena favorita es cuando Clark Gable besa a Vivien Leigh por primera vez en Lo que el viento se llevó.
Para los hombres es cuando se le ve la entre pierna a Sharon Stone en Instinto básico.
Joyas
Las mujeres están muy guapas cuando usan joyas.
Un hombre puede llevar un anillo un reloj y basta, Todo lo que lleve de más le hace parecer un auténtico chulo.
Menopausia
Cuando una mujer llega a la menopausia atraviesa una serie de complicados cambios emocionales, psicológicos y biológicos la naturaleza y la importancia de esos cambios varían individualmente.
La menopausia en los hombres (andropausia) les lleva a una reacción uniforme, se compran gafas de sol de aviador, gorritas de béisbol, guantes de conducir de cuero y se pasean por las tiendas de coches buscando un deportivo de importación.
El teléfono
El hombre usa el teléfono como una herramienta de comunicación y ubicación, lo usa para mandar escuetos mensajes a otras personas y llama solo si es estrictamente necesario.
Una mujer puede pasarse dos semanas de vacaciones con una amiga y cuando regresa a su casa la llama para hablar con ella durante tres horas.
Golpes bajos
Un hombre y una mujer están viendo boxeo en la TV, uno de los boxeadores es derribado por un golpe bajo.
La mujer dice eso debe doler...
El hombre se dobla y siente el dolor de verdad.
Direcciones
Si una mujer al volante se pierde, se detiene en una gasolinera y pregunta.
El hombre considera el preguntar como un signo de debilidad nunca se para conducirá en círculo durante horas mientras dice cosas como “acabo de descubrir un atajo para llegar antes” o “ya estamos cerca, por aquí pasamos la otra vez”…gracias Dios por el GPS
Admitir errores
Las mujeres, a veces reconocen sus errores.
El último hombre que admitió un error fue el general Custer antes de ser masacrado por los indios en la batalla de Little Big Horn.
El hogar
¡Ah, los hijos! Una mujer lo sabe todo sobre sus hijos: cuando tienen la consulta con el dentista, conoce a sus amigos, sus amores, sus comidas favoritas, sus miedos, sus esperanzas, sus sueños...
Un hombre algunas veces se da cuenta de que hay gente bajita que vive en su misma casa.
Vestirse elegante
Una mujer se viste elegante para ir de tiendas, regar las plantas, sacar la basura, contestar al teléfono, ir al gabinete, leer un libro...
Un hombre se viste elegante sólo en dos ocasiones: bodas y funerales…que al cabo es lo mismo.
Desnudos en el cine
Todas las actrices de la historia han tenido que aparecer desnudas en alguna ocasión por exigencias del guión la razón es que las películas las producen los hombres.
No hay muchos actores que salgan desnudos en las películas
Cámaras
Los hombres se toman la fotografía muy en serio, se gastan más de 1000 dólares en material, montan un laboratorio de revelado en el baño y toman clases en una academia.
Las mujeres compran cámaras malas y hacen mejores fotos.
Vestuarios
En los vestuarios los hombres hablan de tres cosas: dinero, fútbol y mujeres. Exageran sobre el dinero, no saben de fútbol ni la mitad de lo que creen y se inventan historias sobre las mujeres.
Las mujeres sólo hablan de una cosa en los vestuarios: sexo. Pero no en términos abstractos: son gráficas, técnicas y nunca mienten.
Lavandería
Las mujeres hacen el lavado cada 2 o 3 días.
Un hombre usa toda la ropa que tiene..., incluso los pantalones de tela formales y la ropa de deporte que guarda de cuando jugaba al fútbol, cuando se queda sin ropa le da la vuelta a una camiseta para que no se noten las manchas y se lleva la montaña de ropa a una lavandería. Además espera encontrarse allí a una mujer y ligar con ella.
Bodas
Cuando se acuerdan de una boda, las mujeres hablan de la ceremonia.
Los hombres hablan de la despedida de soltero o la borrachera del banquete.
Fans e hinchas
Las fans son guapas, simpáticas y muy sexys.
Los hinchas asesinan y dan miedo.
Juguetes
A las niñas les gusta jugar, cuando cumplen los 11 o 12 años pierden interés.
Los hombres nunca se liberan de su obsesión por los juguetes, según se hacen mayores los compran más caros e inútiles.
Ejemplos de juguetes para hombres son: TV en miniatura, teléfonos de coche, electrodomésticos complicados y estúpidos, ecualizadores de audio, robots que sirven cócteles, videojuegos y en resumidas cuentas, cualquier cosa que pite, tenga luces y necesite como mínimo seis pilas alcalinas.
Plantas
Una mujer le pide a un hombre que le riegue las plantas mientras está de vacaciones, el hombre las riega, la mujer llega cinco días después para encontrarse el apartamento repleto de plantas muertas nadie ha conseguido dar una explicación a este misterio.
Bigotes
Algunos hombres pueden verse bien con bigote.
No hay ninguna mujer que esté guapa con bigotes.
Apodos
Con la excepción de las mujeres que van al gimnasio, que se llaman con apodos, las mujeres no suelen usarlos entre ellas si Martha, Carmen y Laura quedan para comer, se llamarán la una a la otra Marta, Carmen y Laura.
Si Darío, Carlos y Jackson quedan para ir a joder por ahí. Se llamarán entre ellos Diario, Charlie, Negro...nunca por su verdadero nombre.
lunes, 6 de julio de 2009
An inconvenient truth
De qué sirve pretender una relación formal si las informales son las que más llaman la atención, las que al final del día revivimos en nuestra mente y nos ayudan a dormir mejor o no nos dejan dormir de la emoción, la aventura del descubrimiento, los trucos de la conquista, la emoción de la atracción y del “feeling” entre dos personas, las miradas y aquel primer beso imborrable que es tan mágico que solo puede darse con los ojos, son cosas que se sienten bien y para algunos se sienten tan bien que no quieren dejar de sentirlo, ya lo dijo Arjona “esos besos que por ser furtivos son como agua en el desierto”
Y esto no es un asunto de género, lo mismo le pasa a mujeres y a hombres, ahora que los hombres son (o somos) un poquito más sin-vergüenzas y las mujeres haciendo gran uso de secretismo y silencio no les ganan ni los illuminati, los hombres pueden llegar a sacar pecho por cuantas relaciones han tenido, sin embargo para una mujer hacerlo representa una disminución en sus posibilidades de encontrar un buen partido…o lo que es peor ser catalogadas de putas, ahora, siendo hombre es mejor cuando no se dice nada, teniendo en mente que “un caballero no tiene memoria”, pero, una verdadera dama sabe reconocer la experiencia en el caballero, al final todo se reduce a un juego de ajedrez, un juego de estrategia en el que, como en todos los juegos de estrategia prima el uso del cerebro, de ahí que muy pocos lo practiquen y la mayoría prefiera el combo: relación-formal + esposa-hornea-galletas + jardín + perro
Pero la conquista es un deporte que muchas personas practican, incluso algunas lo hacen sin saber o en sentido subconsciente, muchos podrán darse de puritanos (as) y jurar que hacen solo lo que la sociedad considera correcto, “solo cosas buenas”, pero debemos obedecer a nuestra naturaleza, claro está que muchos (as) tendrán en su naturaleza nacer, crecer, medio estudiar, cazarse (no está mal escrito, así lo escribo, no hay diferencia), multiplicarse y morirse…para ellos no está mal, pero bueno el asunto es que no hay bueno ni malo, simplemente está lo natural y lo antinatural, pero dado las ganas que tiene el mundo de buscar algo malo, podríamos decir que lo malo es todo lo que no responde a su naturaleza, un tigre que asesina no es malo, simplemente porque responde a su naturaleza.
Llega un punto en donde a pesar de esforzarnos en seguir el camino monótono y aburrido del “bien”, reconocemos que no somos buenos, o quizá por ser tan buenos reconocemos que somos “malos”, y toca seguir hacia el lado oscuro (lámpara, que dramático) aceptando nuestra naturaleza, o quizá nuestra naturaleza nos indica que debemos hacer…el proceso muchas veces es un poco largo pero al final abrazamos nuestro lado oscuro y vemos como nuestro niño interior nos ofrece una amplia e incompleta sonrisa.
Hoy ando con el vaso medio vacío, pero ha sido una semana de revelaciones y de darse en la cabeza con la mano al darme cuenta que todo estaba frente a mí, como dijo un amigo: “un demonio puede pegarle plumas a sus alas y lucir como un ángel, pero al momento del vuelo estas solo estorbarán”
Un saludo para aquellos que abrazan a su niño (o niña) interior con la determinación de haber aceptado su naturaleza, cualquiera que esta sea. Lástima por los que no la conocen aun.
Y no, no espero que todos los que lean esto lo entiendan, solo entenderán aquellos para quienes va dirigido. A los demás gracias por leer XD
jueves, 2 de julio de 2009
las novias y los deportes...
¿Saben por qué hay tan pocas competiciones mixtas? No es por las diferencias físicas. ¡No señor! ¡Es porque las mujeres tienen sus propias reglas!
Tú llegas a la pista de tenis, te colocas, ella saca una vez, falla, vuelve a sacar, vuelve a fallar y entonces dice:
- No vale, no vale, saco otra vez. Ésta no valía porque la raqueta no ha tocado la pelota.
Conozco una chica que siempre tiene alguna excusa: "¡No estaba preparada!" o "Es que esta raqueta me va grande", y la que más me alucina: "Es que si me miras, me desconcentras" Que si la miro la desconcentro. ¡Pues que juegue con José Feliciano.!
El caso es que cuando por fin consigo conseguir la pelota (por supuesto, yendo a buscarla, porque es imposible que la pelota pase a mi campo) saco, se la tiro con dulzura, como un globito. Y entonces ella va y me grita:
- ¡ooooyeeeee, tíramela normal...!
Entonces hago un saque normal y:
- ¡caraaaaajo.! ¡Qué bestia! ¡Tiras a matar...! ¡Parece que te fastidia jugar conmigo!
Y luego hay una cosa que no falla: en el momento en que la pelota se ha ido fuera de la cancha, y tiene que ir ella, es el momento en que dice:
- Ya no quiero jugar más.
- ¿Pero ya te quieres ir? Si he pagado dos horas de pista.
- Vale, pueeees. Tú pelotea, que yo te miro.
¡Y se sienta en una esquina a hablar por el móvil!
- Pues nada, aquí jugando al tenis con éste.
Pero con el deporte que realmente hago ejercicio es con el ping-pong..
Porque jugar al ping-pong con una chica es algo así: tú sacas: ¡pin!¡tac.
tac, tac, tac, tac! ¡pin! ¡tac, tac, tac, tac.! Y ¡pin! Y ella:
- ¡chuzo, es que la mesa es muy pequeña! ¿por qué no jugamos al squash, que la pelota no se escapa?
Ahora, lo que peor llevo es lo del futbolín. Vamos a ver: ¿por qué a las chicas les gusta tanto darle vueltas al mango? Tú ahí, con tus toques de muñeca, cubriendo el hueco y llega ella y se pone a hacer el molinillo… Y claro, la jodida mete gol! Y encima empieza a gritar como una histérica por todo el bar:
- ¡Soy Messi! ¡Soy Messi!
Y tu:
- ¡Pero si no vale...!
¡Cualquier tipo sabe que eso no vale!
Ahora, lo que de verdad me hace echarme a temblar es cuando después de una parrillada con los amigos, los chicos decimos que vamos a jugar un partido de basket y ellas dicen:
- ¡Nos apuntamos, nos apuntamos! ¡Esperen un momento que Mari Mar (nombre protegido) está haciendo pis!
Y es que cuando juegas al basket con ellas, se pueden oír frases tan inauditas como:
- ¡A mí no me pases!
Y después de todas estas cosas, uno se plantea: ¿por qué insistimos los hombres en hacer deporte con ellas? Pues para impresionarlas…es algo inconsciente…automático
Como cuando le dices:
- Mira, mira. ¡Voy a aguantar la respiración debajo del agua! ¡Cronométrame!
Y cuando sales morado:
- ¡Aaaaaaaaahhhh! ¿Cuánto he hecho?
Y ella levanta la cabeza del libro y dice:
- ¿Eh?
- ¡Pero bueno! ¡Creo que había batido mi record!
- ¡Ay.! Pues, dale, cielo, métete otra vez a ver si aguantas hasta que acabe el capítulo.
Pero tú no te rindes. Tú estás enamorado y sólo quieres demostrarle que, aunque no lo parezca, llevas dentro un campeón; van los dos en el kayak y, de repente, te lanzas al mar:
- ¿A que te gano, yo nadando y tú en la barca?
Casi me muero de lo deprisa que le daba ella. Chaca, chaca, chaca. Nunca vi tanta crueldad en una persona. Ella me veía ahogarme y pedaleaba más... y yo la veía alejarse, cada vez más pequeñita, gritando:
- ¡Soy Messi! ¡Soy Messi…!
Ahora, es peor cuando es ella la que elige el deporte. Un día viene y te dice:
- Cariño, ya sé cuál es el mejor ejercicio que podemos hacer en pareja. Mueves todos los músculos, sudas y, además, disfrutas…chuta cantan los ángeles y escuchas a Bach en el fondo y recuerdas a tu amigo con su “se han alineado los planetas” y te regresa a la realidad con:
- ¡los bailes de salón!
Así que nos apuntamos a un curso de bailes de salón, que, por cierto, las chicas, ¿para qué van? ¡Si ya saben! Porque tú ves que tu novia llega, y el primer día se pone a bailar de puta madre y de una forma sexy que tú nunca habías visto, claro tú también bailas de una forma que ella tampoco había visto nunca, parece que te hayan llenado los bóxers de cemento Pórtland.
Y de repente ella te agarra por detrás:
- Venga, mueve la cintura, hijo, eres más soso que Alvarito.
Te suelta y se pone a bailar cada vez más lejos, y más lejos. Y tu detrás:
- Cariño…bailar de lejos no es bailar.
Y tu, disimulando, intentando arrimarte a alguna pareja para que no se supiera quién es el que sobraba de los tres, pero todos huyen, y pasito a pasito consigues esconderte detrás de una columna, y de pronto notas que alguien viene por detrás y te agarra de la cintura, te das la vuelta y te encuentras a Oswaldo, el profesor, un cubano de dos metros que te dice:
- ¡Mueve tu cu-cu.!
- ¿Mi qué?
- ¡Mueve tu cu-cu!
Y claro, tienes al tipo tan pegado que piensas: "Pues claro que muevo el cu-cu, que si no, este man me hace diana."
Al final cabreado le agarras a tu novia y le dices:
- Mira, vámonos a jugar al ping-pong, que si tengo que mover el cu-cu, prefiero moverlo recogiendo las pelotas.